Testigo fiel
Apuntalan a ex priista para el Tribunal de Conciliación
Por: Jesús Torres
La elección del presidente del Tribunal de Conciliación y Arbitraje es bola cantada, ya se supo que quien sustituirá a Javier Vargas Ramón, será nada más y nada menos que el ex priista, Juan Francisco Trujillo Navarro, quien despacha como director de la Unidad de Enlace Institucional de la subsecretaría de Gobierno desde que era gobernador, Andrés Granier Melo.
El funcionario, quien forma parte de la terna enviada por el Ejecutivo al Congreso local, junto con José Irving Madrigal Mandujano y Ruth del Carmen Gerónimo Bautista, en el 2011 fue presidente de la Comisión de Justicia Partidaria del PRI en Tabasco.
En ese entonces fue acérrimo defensor de Humberto Mayans Canabal cuando el priista, Pedro Gutiérrez impugnó ante el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) el nombramiento del senador como consejero político estatal del tricolor.
Un año después, en el 2012, Trujillo Navarro aún en el cargo de presidente de la Comisión Estatal de Justicia Partidaria echaba por tierra un recurso que había presentado Evaristo Hernández Cruz contra del proceso interno de selección del candidato al gobierno del estado. Decía que ya todo estaba decidido en la persona de Jesús Alí de la Torre, quien había ganado la Convención de Delegados por un amplio margen.
Para algunos lectores de esta columna, quizá no les sorprenda el pasado priista de Trujillo Navarro, quien además de ser primo de Georgina Trujillo, hoy diputada federal plurinominall, al igual que muchos otros funcionarios del gobierno nuñista desempeñan altos cargos en el gabinete del “cambio verdadero”, empezando por el jefe de todos, el gobernador, Arturo Núñez; lo mismo que el secretario de gobierno, Cesar Raúl Ojeda Zubieta; Agapito Domínguez, director del ISEET; el titular de Educación, Víctor López Cruz, y Pedro Jiménez León, en la secretaría de Desarrollo Agropecuario, entre otros muchos.
Lo preocupante de la llegada del ex priista al Tribunal de Conciliación y Arbitraje, el cual sólo será de mero trámite en el legislativo, no es por el color de su pasado, sino la consigna que lleva al momento de asumir el cargo: poner freno a los laudos laborales que se estiman en unos mil 100 millones de pesos hasta el segundo trimestre de este año, la mayor parte de los adeudos se concentran en seis municipios, que son Cárdenas, Jalpa de Méndez, Jonuta, Paraíso, Macuspana y Nacajuca
De acuerdo con abogados laborales, la decisión ya está tomada por el gobernador en la persona de Trujillo, en común acuerdo con el secretario de Gobierno con el fin de poner alto a todos los trámites de los trabajadores para que no se les pague ningún laudo ganado, esa es la consigna.
Por lo que se ve, Javier Vargas, quien renunció la semana pasada a la titularidad del Tribunal de Conciliación, ya era incómodo para la actual administración. Y no era para menos, su actuar estaba fincado en obligar con la ley en la mano a los alcaldes salientes a dejar finiquitado todo tipo de adeudo para que las nuevas administraciones no tuvieran problemas financieros debido a que no hay ningún rubro etiquetado en el presupuesto para pagar laudos.
Los más afectados con estas decisiones, sin lugar a dudas seguirán siendo como siempre los trabajadores despedidos quienes tendrán que esperar muchos años más para que se les haga justicia.