Con auténticos golazos, Tigres y Gallos Blancos se quedaron con un punto al inaugurar la Jornada 7 con el 2-2 que reflejó un buen partido y también puso al portero Tiago Volpi como la figura del mismo al evitar tres ocasiones importantes para los del «Tuca» Ferretti.
Las defensas fueron exhibidas. Ya Zelayarán había avisado con un disparo desde fuera del área que se estrelló en el travesaño pero minutos después la pelota parada fue la vía como Tigres abrió el marcador.
André-Pierre Gignac apareció por séptima vez en el torneo al empujar dentro del área chica un rebote que la defensa queretana no supo despejar, pero antes de terminar el primer tiempo la visita cometió el mismo error cuando el «Pájaro» Benítez bajó la pelota en el área para que Forlín hiciera lo mismo que el francés y pusiera el 1-1 a los 45 minutos.
La segunda parte comenzó con el mismo vértigo aunque con protagonistas no pensados.
Marco Jiménez convirtió un auténtico golazo cuando apareció en la media luna y prendió de aire la pelota que George Corral le bajó para ponerla en el ángulo de la portería de Nahuel Guzmán… golazo.
Tigres no podía quedarse atrás, ni en cantidad ni en calidad. Javier Aquino realizó otra obra de arte al sacar un disparo de aire que Volpi alcanzó a rasguñar pero solo para ponerla más cerca del ángulo y embellecer las postales que se tomaron por el tanto que se convirtió en el 2-2 definitivo.
Volpi se convirtió en el héroe del partido al sacar dos pelotas de gol, mientras que Candelo que había ingresado de cambio fue el verdugo al irse expulsado por doble amarilla.
[MEDIOTIEMPO]