La criticada práctica de las Juanitas se reedita en Chiapas.
Esposas, hermanas y otras mujeres familiares de políticos varones locales —principalmente de las fuerzas mayoritarias, el Partido Verde Ecologista de México (PVEM) y el Revolucionario Institucional (PRI)— aparecerán en las boletas de la elección del próximo domingo, pero solo para cumplir con la cuota que exige que igual número de candidaturas para ambos géneros.
Los 12 partidos que participarán en los comicios para renovar 122 alcaldías y 41 diputaciones locales debieron nombrar a más de 600 mujeres candidatas a presidenta Municipal y diputada local, y redistribuir otras 5,000 posiciones en las planillas, luego de que así lo ordenó el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF).
Pero en este enroque, muchos de los ahora excandidatos mantendrán sus posiciones de poder, pues prevén que, de ganar las mujeres, ellos ocuparán los cargos al paso de algunos meses.
Los casos
La Red Chiapas por la Paridad Efectiva (Repare), organización que denunció ante el TEPJF el incumplimiento de la paridad de género y ganó la sentencia que obligó a los partidos a designar a más candidatas mujeres, indicó que si bien la determinación de los magistrados electorales fue un logro significativo, en muchos casos los excandidatos únicamente hicieron enroques para colocar a incondicionales.
Candelaria Rodríguez Sosa, integrante de Repare, mencionó en entrevista varios ejemplos, de acuerdo con el registro de candidaturas que aprobó el Instituto de Elecciones y Participación Ciudadana (IEPC) de Chiapas, el cual cotejó CNNMéxico.
La nueva candidata del PRI a la Presidencia de Jiquipilas es María Magali Farrera Esponda, hermana de Rafael Fernando, quien ocupa la segunda posición como candidato a síndico municipal. Por ley, este cargo asume como titular del Ayuntamiento en caso de ausencia del alcalde o alcaldesa, y en segundo lugar tocaría al regidor.
En tanto, en lugar de Juan Roberto Romero Espinosa en la candidatura a la Presidencia municipal de Villa Comatitlán por el Partido Verde, fue designada su esposa Claudia López Aguilar; él quedó como candidato a regidor.
En Soyaló, Henry Iván Urbina Castellanos, excandidato a alcalde por el PVEM, fue sustituido por su esposa, Rocío Guzmán Gómez. Él quedó como candidato a regidor.
En Las Rosas, Enrique Javier Molina Padilla fue bajado de la candidatura a alcalde del Verde; en su lugar, quedó su esposa Blanca Aroly González García, y él como candidato a síndico.
En Yajalón, Jorge Armando Pinto Aguilar, dejó en su lugar como candidato del PVEM a su esposa Aracely Pimentel Utrilla. En este municipio, el actual a alcalde es Alfredo Pinto Aguilar, hermano del exabanderado.
En San Lucas, también en la planilla del Verde, el candidato David Octavio Cabrera Panigua, fue bajado de la candidatura a alcalde, y en su lugar quedó su esposa Marisol González Córdova. Él ahora aparece como aspirante a síndico.
Además, Horacio Corzo Guzmán fue reemplazado como candidato del PVEM a diputado local en el 23 Distrito, y como titular quedó su esposa, Rosario Guadalupe Pérez Espinosa.
El representante del PVEM ante el IEPC, Mauricio Mendoza Castañeda, declinó conversar con CNNMéxico sobre el criterio que utilizó su partido para la designación de las mujeres que quedaron inscritas como candidatas.
“La indicación que tengo es que no podemos hablar del nombramiento de las candidatas. Es la disciplina de mi partido y me tengo que acatar”, dijo.
El Partido Verde, al igual que el PRI, tuvo que cambiar al 40% de sus candidatos hombres por mujeres. Es decir, realizó cambios en 48 de las 122 planillas correspondientes a las presidencias municipales.
Por su parte, Hiber Gordillo, representante del PRI ante el IEPC, también rechazó ofrecer una postura al respecto. En entrevista telefónica, comentó a CNNMéxico que solo podía manifestar que su partido ya había cumplido con la paridad de género.
El presidente del PVEM, Eduardo Ramírez Aguilar, y el del PRI, Roberto Albores Gleason, no respondieron de inmediato a una solicitud de entrevista.
Repare señaló que aún documentan otros casos en el resto de las más de 6,000 posiciones que se cambiaron por parte de todos los partidos tras la sentencia REC-294-2015 del TEPJF.
Otros partidos que cambiaron candidatos por candidatas fueron Mover a Chiapas, que tuvo que remplazar al 33% de sus abanderados; el Humanista, el 30%; Nueva Alianza, al 26%; de la Revolución Democrática (PRD), al 24%, igual que Chiapas Unido; Movimiento Ciudadano, al 18%; y Acción Nacional (PAN), al 10%, igual que Encuentro Social y del Trabajo (PT).
Las activistas de Repare llamaron a ciudadanas inconformes con la estrategia de las llamadas Juanitas a que denuncien por la vía legal.
“En Repare, condenamos todos los artilugios que han sido utilizados para el ajuste de las listas electorales y los cuales han sido causa de grandes descontentos”, señaló la organización.
El término juanitos se sumó al vocabulario de la política mexicana desde 2009, y se usa popularmente para designar a una persona que encabeza una candidatura solo para beneficiar a otro contendiente o para después ceder el cargo en caso de ganar la elección.
‘Es un engaño que le vamos a hacer a la gente’
Esta situación queda ilustrada con el caso de la priista Magdalena Gabriela Santiago Figueroa, quien era candidata a síndica de Jiquipilas y a quien se ofreció contender por la Presidencia Municipal… pero a condición de que después abriera el camino para que asumiera como alcalde a Rafael Fernando Farrera Esponda, uno de los ‘damnificados’ por la sentencia del TEPJF.
Así lo expresó el propio Farrera Esponda a Santiago Figueroa en una conversación telefónica a la que CNNMéxico tuvo acceso.
“Me habló el senador (Roberto Albores Gleason, presidente del PRI en Chiapas) y me dijo: ‘No te preocupes porque van a tener el apoyo del gobernador (Manuel Velasco Coello, militante del PVEM). Él los va a impulsar otra vez. Hay una propuesta de que ganemos y luego nos va a subir a la Presidencia (municipal). Eso está apalabrado. Me dijo sólo: pon a una persona ahí (una mujer)”, se escucha relatar al excandidato.
En la conversación, Santiago Figueroa cuestiona a su compañero por qué no la dejan contender para ser alcaldesa, si ella era la candidata a síndica, es mujer y tiene trabajo político en la región.
«Están pidiendo una mujer y yo soy mujer, están pidiendo que quieren ganar y yo la puedo ganar (…) ¿Qué más queremos para que el PRI gane?”, revira Santiago Figueroa.
Farrera Esponda le contraofrece quedar como regidora, un cargo menor.
«El senador me dijo: ‘Usted quede de síndico porque usted va a subir (a alcalde). Lo van a hacer (nombrar) en el Congreso y en el Cabildo (…) Yo me encargo de que usted suba”, agrega el priista al reportar la charla que a su vez tuvo con su dirigente partidista.
Pero Santiago Figueroa declina participar.
“Es un engaño que le vamos a hacer a la gente y a mí no me parece. Lo más correcto es que yo subiera porque soy mujer y he trabajado mucho», menciona.
Al final, en el registro de candidaturas quedó como candidata del PRI a la presidencia mun
icipal de Jiquipilas María Magali Farrera Esponda, hermana de Rafael Fernando, quien ocupa la segunda posición como candidato a síndico municipal. Fuente: CNN
