Testigo fiel
Por: Jesús Torres
Caída del ‘Mayo’, ¿Efecto Trump?
La caída de Ismael ‘El Mayo’ Zambada, es un mensaje claro del interés que tiene el gobierno de EU en desarticular las organizaciones criminales que existen en México, pero también tuvo mucho que ver las presiones políticas derivado de la elección presidencial a celebrarse en noviembre próximo.
La operación realizada por elementos de la Agencia Antidrogas (DEA, por sus siglas en inglés), se llevó todos los créditos el jueves pasado por la captura del cofundador del Cártel de Sinaloa y de Joaquín Guzmán López, uno de los hijos del ‘Chapo’ Guzmán.
‘El Mayo’ Zambada es requerido desde hace décadas por la justicia norteamericana por el tráfico de diversas drogas, tráfico de armas, lavado de dinero, asesinatos y secuestros.
Mientras que sobre el hijo del ‘Chapo’ pesan acusaciones de tráfico de cocaína, fentanilo, heroína y metanfetaminas.
Lo que más llama la atención es que la captura del ‘Mayo’ Zambada se da a casi tres meses de que los estadounidenses elijan a su presidente y después de las acusaciones que ha vertido el candidato republicano, Donald Trump en temas de seguridad y narcotráfico.
Las más fuertes fueron las que concedió a la revista Rolling Stone en la que advierte enviar “escuadrones de asesinos” a México para eliminar a capos de cárteles si llega a la presidencia.
Pero además, de acuerdo con la nota publicada, se destaca que el republicano autorizaría estas unidades de operaciones especiales para actuar en territorio mexicano de manera encubierta, con o sin el consentimiento del gobierno de México.
En víspera de la caída del ‘Mayo’ Zambada, el candidato republicano concedió también una entrevista a la televisora Fox News.
Insistió en que México está ‘petrificado’ ante los cárteles porque tienen el poder de sacar un presidente en dos minutos. “Los cárteles están dominando México”, expuso.
Trump aseguró que como presidente dará un ultimátum a México para resolver la situación y que si no cumple, entonces EU tomará acciones armadas.
Coincidencia o no, la señal que el gobierno de Joe Biden está enviando a su similar de México en gran medida tiene que ver con las presiones políticas que el aspirante republicano a manifestado en las últimas semanas cada vez más endurecidas contras las organizaciones criminales y las autoridades mexicanas.
Y no es para menos, tanto en la Casa Blanca como en Palacio Nacional tienen conocimiento de lo que representaría para ambos países, en todos los sentidos, la llegada por segunda vez de Donald Trump a la oficina oval.
