El movimiento islamista Hamás disparó la noche del martes 130 cohetes contra el área de Tel Aviv, uno de las principales núcleos urbanos de Israel, y el centro del país en respuesta a un bombardeo en Gaza.
Hamás había amenazado previamente con disparar a esta zona de Israel si atacaba el conocido edificio Hanide de 14 plantas, en la Ciudad de Gaza, que esta tarde fue bombardeado por aviones de combate en un fuerte ataque.
El edificio Hanide, de uso residencial, se derrumbó tras ser alcanzado por un ataque aéreo israelí.
Imágenes de video mostraron tres columnas de humo negro espeso saliendo de la torre, con sus pisos superiores intactos al tiempo que se derrumbaba. En la torre había una oficina usada por el liderazgo político de los gobernantes islamistas de Gaza, Hamás.
Israel envió 80 cazas para bombardear Gaza y acumuló tanques en la frontera.
Los residentes del bloque y la gente que vive cerca fue advertida de que debía evacuar la zona cerca de una hora antes del ataque aéreo, según testigos. No quedó claro de inmediato si el edificio fue evacuado por completo o si hubo heridos.
La electricidad en la zona en torno al edificio se fue y los residentes estaban recurriendo a linternas. Poco después del ataque, Hamás y el grupo Yihad Islámica anunciaron que responderían lanzando proyectiles contra Tel Aviv.
“Ahora estamos cumpliendo nuestra promesa”, dijo el brazo armado de Hamás en un comunicado. “Las Brigadas Qassam están lanzando su mayor ataque con cohetes contra Tel Aviv y sus suburbios, con 130 cohetes, en respuesta al impacto contra torres residenciales por parte del enemigo”.
Miembros de Hamás y simpatizantes de la organización celebraron los ataques en las calles de Gaza, mientras que también se hicieron anuncios sobre ellos desde los altavoces de las mezquitas.
El ataque contra el área de Tel Aviv –a 60 kilómetros de Gaza– se produce después de que Hamás ya lanzara ayer 7 cohetes contra Jerusalén, a raíz de las protestas y disturbios entre palestinos y fuerzas israelíes que fueron el detonante de esta escalada, la más agresiva de los últimos años. Hasta ahora se ha saldado con la muerte de 28 palestinos del enclave y 2 mujeres en Israel.
Según el Ejército israelí, Hamás y el grupo islamista Yihad Islámica lanzaron en poco más de 24 horas al menos 630 cohetes hacia territorio israelí. De estos, dos centenares fueron interceptados por el sistema antimisiles Cúpula de Hierro, mientras que 150 fueron disparos fallidos que cayeron dentro de la misma Gaza.
Desde ayer, las alarmas no han dejado de sonar en las comunidades israelíes colindantes con la franja, en máxima alerta. A su vez, el primer ministro israelí en funciones, Benjamín Netanyahu, advirtió hoy de que el Ejército aumentará “la intensidad y cantidad” de bombardeos de represalia contra Gaza.
Israel suspendió todos los vuelos desde el aeropuerto Ben Gurion de Tel Aviv.
El Ejército también ha movilizado a miles de reservistas y se prepara para una escalada que podría tener larga duración.
Según medios, hasta ahora, ninguno de los mediadores que suelen comunicarse entre Hamás e Israel ha podido mitigar la situación, y no se ve una salida inminente a este fuerte pico de violencia.
El brote más grave de enfrentamientos desde 2019 entre Israel y las facciones armadas de Gaza comenzó con choques entre palestinos y policías israelíes en la mezquita de Al Aqsa de Jerusalén el lunes.
La ciudad santa de Jerusalén ha vivido en tensión durante el mes de ayuno musulmán del Ramadán, y a la fricción se sumó la amenaza de un dictamen judicial para desalojar a palestinos de hogares reclamados por colonos judíos.
El primer ministro, Benjamin Netanyahu, dijo en un comunicado en video que “tanto la fuerza como la frecuencia de los ataques aumentará” en respuesta al lanzamiento de cohetes desde Gaza, un enclave de 2 millones de habitantes.
Este martes, antes del derrumbe del edificio Hanide, el Ministerio de Salud de Gaza dijo que al menos 28 palestinos, incluidos 10 niños, murieron y 152 resultaron heridos por los ataques israelíes desde que Hamas lanzó cohetes el lunes hacia Jerusalén por primera vez desde 2014.
Con información de Efe y Reuters
