Testigo fiel
Por: Jesús Torres
Tabasco en ‘foco rojo’ electoral
A estas alturas del proceso electoral, Tabasco escaló ya a un nivel de violencia que ha encendido los “focos rojos” por las amenazas y ataques que han sufrido los candidatos inmersos en las campañas políticas previo a las elecciones del próximo 6 de junio.
Lo más lamentable y que hizo que la sangre llegara al río fue el asesinato del joven activista del PRD, Oswaldo Gómez Padilla, ocurrido la madrugada del lunes en el municipio de Jonuta.
La denuncia por estos hechos ya se encuentra en la Fiscalía General del Estado para que autoridades tomen cartas en el asunto y deslinden responsabilidades. Urge se actúe cuanto antes.
Derivado de la tensión electoral que prevalece en Jonuta, el dirigente del PRI, Dagoberto Lara Sedas pidió al Instituto Electoral y de Participación Ciudadana (IPECT), que se brinde protección a la abanderada del tricolor, Gina Roxana Lezama, quien ya fue víctima de agresiones e intimidación de parte de Morena.
Y no es el único caso, según el líder priista se solicitará ante el órgano electoral seguridad para otros cuatro aspirantes más, aunque no reveló sus nombres.
Estos vendrían a sumarse a la protección que pidieron los abanderados de la coalición, PRI-PAN, a la alcaldía de Centro, Andrés Granier Melo y Fabián Granier Calles, candidato a una diputación local.
La semana pasada, el dirigente del PVEM, Miguel Ángel Vélez hizo lo propio al requerir a las autoridades electorales “blindaje” para sus candidatos ante amenazas que han recibido.
Se trata de la candidata a diputada federal, Carolina Lastra y un aspirante del municipio de Huimanguillo que no dio su nombre. Incluso ya analizan hacer dos solicitudes más de seguridad para sus contendientes.
Hasta hoy los consejeros del IEPCT no han fijado un posicionamiento sobre el clima de violencia que se vive en Tabasco así como tampoco han resuelto si se brindará seguridad a los candidatos.
Ni el mismísimo gobernador, el morenista, Adán Augusto López Hernández se ha pronunciado al respecto, aun cuando el estado registra una tendencia al alza en índices delictivos. Al calor de las campañas todo puede pasar, se tiene que actuar a tiempo y evitar más derramamiento de sangre.
