Franja Sur
Tabasco tiene Todo
René Alberto López
Apenas la semana pasada estuvo en Villahermosa el presidente Enrique Peña Nieto para anunciar la reactivación económica en los estados de Tabasco y Campeche.
Ese miércoles 4 de mayo quedará registrado en la historia como un vuelco a la estrategia económica en el sureste del país, pues a diferencia de aquellos días, cuando fenecían los años 70, en que se anunció con bombo y platillo el arribo del boom petrolero, ahora el gobierno federal le apuesta a la “despetrolización de la economía”.
El tema viene a colación porque el sábado pasado estuvo en las oficinas del grupo de periodistas denominado el Pentágono, la diputada federal Georgina Trujillo Zentella y ahí se habló ampliamente de los problemas que enfrenta el estado y sus posibles soluciones.
Precisamente uno de los proyectos de la legisladora es la apuesta de voltear al campo para sacar al estado del subdesarrollo en que se encuentra.
El tema de levantar la agroindustria no es nuevo para la legisladora, lo conoce al pie de la letra, lo trae en la sangre, y, lo ha venido manifestando.
En el encuentro con los comunicadores habló de lo que distinguió a los gobiernos que han dejado huellas, su “sello”, por ejemplo, el de su padre, Mario Trujillo García, ex gobernador de Tabasco, fue el fortalecimiento de la agroindustria a lo largo y ancho del estado.
Así como el sello de Enrique González Pedro fue el impulso a la cultura y la edificación de puentes que hoy comunican a los pueblos de Tabasco.
Mientras que Leandro Rovirosa Wade se destacó por robustecer la infraestructura urbana en Villahermosa. Pero, sin dudas, el que aportó al campo y consiguió su auge fue Mario Trujillo. Ahí radicó su gran logro.
Esta semana el columnista platicó con tabasqueños de viejo cuño y, con toda intención, en torno de una plática de café, puso sobre la mesa el trabajo de los ex gobernadores.
No hubo uno que no reconociera el desarrollo que se alcanzó en la gestión de Mario Trujillo. Fueron, dijeron, los tiempos de oro para los cacaoteros, los copreros, ganaderos, plataneros, cañeros, y pimenteros. El oro verde en todo su esplendor.
Qué tiempos aquellos cuando había trabajo y progreso en factorías como la Industrializadora de Cacao de Tabasco, Oleaginosa del Sureste, el Frigorífico de Tabasco, la Comercializadora de Pimienta y los ingenios azucareros, sin descuidar el sector pesquero.
Todo eso se derrumbó con la llegada del petróleo, cuya actividad no sólo contaminó las tierras, sino que los lugareños abandonaron el trabajo del campo.
Georgina Trujillo tiene clara la visión de poner de nuevo los ojos en el campo, lo expone con toda propiedad: impulsar políticas públicas para regresar a trabajar la tierra, a la siembra, y fortalecer la agroindustria. Esa que se nos murió en las manos al abandonar el trabajo agrícola por depender de la actividad petrolera.
Hoy, que los precios del petróleo están en la peor de sus agonías, la salida de Tabasco es impulsar la producción en los distintos sectores agrícolas. Hay que retomar la estrategia de Mario Trujillo García, para alcanzar el desarrollo: apostarle de nuevo a la agroindustria. Recordemos que “Tabasco tiene Todo”.
La botica
Miguel Ángel Valdivia, dirigente estatal del PRI, se comunicó con este franjero para precisar que “los rumores y especulaciones en la política tabasqueña están a la orden del día”, y puntualizó que en el caso de la ex diputada federal, Ady García López “su relación con el partido es sólida”, al igual que la tienen muchos cuadros políticos como, dijo, se lo han hecho saber en diversas reuniones sostenidas, donde “el punto de coincidencia es la unidad y reconstrucción del PRI”.
