La Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) aprobó con cuatro votos a favor y uno en contra el consumo recreativo de la marihuana. La medida fue avalada por los ministros Arturo Zaldívar, Olga Sánchez Cordero, Alfredo Ortiz Mena y José Ramón Cossío Díaz; sólo el Ministro Jorge Mario Pardo la rechazó.
La medida sólo beneficiará a cuatro personas que impugnaron dos artículos de la Ley General de Salud.
Durante el debate dos organizaciones que se manifestaban a favor y en contra de la legalización de la mariguana con fines recreativos comenzaron a pelearse para hablar por el megáfono. La Coordinadora de Organizaciones Mariguana Liberación (COMAL) asegura que el proyecto no está bien redactado, además de que no beneficia. Por su parte, la organización Reverdecer Colectivo manifiesta su apoyo a la medida.
El proyecto discutido este día fue realizado por el Ministro Arturo Zaldívar Lelo de Larrealuego de que la SCJN atrajera el amparo interpuesto por cuatro personas que solicitaron cultivar, distribuir y usar mariguana.
Los quejosos son Francisco Torres Landa y otras cuatro personas, que crearon la Sociedad Mexicana de Autoconsumo Responsable y Tolerante (Smart), para pedir autorización para sembrar, producir y consumir mariguana sin fines de lucro a la Comisión Federal contra Riesgos Sanitarios (Cofepris).
El proyecto elaborado por Zaldívar califica que la Ley no permite el uso recreativo, sino que elude criminalizar la portación en cantidades mínimas y que tampoco permite su cultivo para uso personal. El Ministro también sostiene que con la Ley como hoy está redactada, afecta derechos fundamentales y no explora alternativas menos extremas para regular el consumo y prevenir las afectaciones que generan.
El que se permita tener cantidades mínimas de mariguana, según Zaldívar, “no consagra de ninguna manera una autorización o un derecho al consumo personal en los términos en los que lo solicitan los quejosos, puesto que además de que únicamente se limitan a despenalizar el consumo en una cantidad muy pequeña, dichos preceptos no permiten la realización de las otras actividades correlativas al consumo, como siembra, cultivo, cosecha, preparación, transporte, etcétera”.
México es el país del continente americano que más ha padecido las consecuencias negativas de la guerra a las drogas dejando altos índices de violencia y corrupción por parte de las instituciones, así como el aumento del poder de grupos delictivos.
En México, según la Encuesta Nacional de Adicciones 2011 en lo que se refiere a drogas ilícitas, la mariguana es con respecto al 80 por ciento del total de drogas, la de mayor consumo.
“La tendencia al crecimiento que se observó entre 2002 y 2008 se detuvo en los siguientes tres años ,de 2008 a 2011, pues no se observan cambios significativos en la proporción de personas que reportan consumo de cualquier droga en el último año […] Tampoco se aprecian diferencias en el consumo por tipo de droga”.
Según encuestas como la que realizó Parametría el año pasado, aún existe una resistencia fuerte de la sociedad, pues cuatro de cada cinco mexicanos se opone a la legalización, mientras dos de cada tres está a favor del uso medicinal.
De acuerdo a las conclusiones del estudio Drogas DF, hecha por el Colectivo por una Política Integral hacia las Drogas, A,C., los mercados de drogas ilícitas en la Ciudad de México es de unos 85 mil usuarios/clientes. De este total, un 85 por ciento es consumidor de mariguana, un 7 por ciento consume anfetaminas, y un 4 por ciento es usuario de cocaína.
El estudio encontró también que ha aumentado el número de mujeres consumidoras, especialmente jóvenes. El gasto promedio semanal de drogas entre los usuarios es de 21.53 dólares. Teniendo en cuenta que el tamaño del mercado es de 85 mil usuarios, esto representa un valor de mercado de aproximadamente 96 millones de dólares.
En marzo pasado, el Instituto de Atención y Prevención de Adicciones de la ciudad de México detalló que en los últimos cinco años, en el DF el consumo de mariguana entre jóvenes pasó del 4 al 6.6 por ciento.
La legalización del cannabis para uso recreativo en dos estados de EU, así como su regulación del mercado en Uruguay, son significativas en la opinión pública mexicana. La instauración del debate sobre la legalización de la mariguana en la Ciudad de México en 2013 considera reformas en las políticas dirigidas a los usuarios.
No obstante la opinión pública es bastante conservadora en materia de legalización, pues sólo el 37 por ciento de la población la aprueba, según un estudio reciente de Asuntos del Sur.