Donald Trump y Mitt Romney pusieron de lado las duras críticas que se lanzaron en la campaña presidencial y por más de una hora hablaron hoy, en un encuentro privado, sobre los retos de política exterior para Estados Unidos.
La reunión, realizada en el campo de golf propiedad del presidente electo en Bedminster, Nueva Jersey, fue una de la casi media docena de encuentros de Trump con potenciales prospectos para ocupar cargos en su gabinete, incluyendo Romney, quien ha sido mencionado con candidato a secretario de Estado.
Romney se dijo satisfecho por el encuentro de cerca de 80 minutos, poco después de despedirse de Trump, quieren lo acompañó hasta la puerta de la mansión, donde lo había recibido antes junto con el vicepresidente electo Mike Pence.
“Pasó bastante bien”, dijo Trump cuando los reporteros lo consultaron sobre el encuentro, antes de volver al interior de la amplia casona.
Romney no respondió cuando un reportero le preguntó si se había disculpado con Trump por sus críticas durante la campaña.
“Tuvimos una conversación muy amplia respecto a los varios escenarios del mundo donde hay interés de Estados Unidos”, dijo ante las cámaras de televisión instaladas en el Club Nacional de Golf Trump.
Dijo que pudo intercambiar con Trump puntos de vista sobre estos tópicos, “una discusión a fondo y profunda en el tiempo que tuvimos, y agradezco la oportunidad de hablar con el presidente electo, y espero con anticipación la próxima administración y las cosas que irá haciendo”.
Trump se reunió también con el general retirado James Mattis, considerado un fuerte prospecto para secretario de Defensa, así como por Michelle Rhee, extitular de Educación del Distrito de Columbia, y quien ha sido mencionada como prospecta secretaria de Estado.
El presidente electo recibió también a Betsy DeVos, exdirectora del Partido Republicano en Michigan y quien también es mencionada como candidata a presidir el Departamento de Educación.