Testigo fiel
Por: Jesús Torres
Samuel, el ‘chico’ de Palacio
Para nadie era un secreto que Samuel García Sepúlveda, gobernador en funciones o con licencia de Nuevo León y ex aspirante presidencial de MC fue utilizado como esquirol desde Palacio Nacional.
El aprendiz de la política al igual que su dirigente, Dante Delgado, -quien operó para López Obrador en las elecciones de 2018-, creyó que catapultado como candidato pulverizarían el voto de la oposición en la carrera hacia el 2024.
Arropado por AMLO, el naranjista ‘fofo fofo’ no le importó pisotear la Constitución de su estado, esa que juró cumplir y hacer cumplir, para dar rienda suelta a sus locas aspiraciones políticas.
Como un chivo en cristalería, Samuel García rompió con el ordenamiento constitucional de su estado y creo una crisis legal y política en la que tuvieron que intervenir otros poderes como la Suprema Corte de Justicia de la Nación.
En medio de esas aguas turbulentas, el gobernador de Nuevo León recibió todo el respaldo del inquilino de Palacio Nacional y de la precandidata única de Morena, Claudia Sheinbaum Pardo como símbolo de una perversa alianza electoral rumbo al 2024.
La tenebra diseñada desde las más altas esferas del poder tenían como propósito utilizar al ‘pequeño saltamontes’ de la política para socavar electoralmente a la aspirante presidencial del Frente Amplio por México, Xóchitl Gálvez.
Vuelto a su realidad, con el resolutivo de la Corte, Samuel García al asumir el cargo nuevamente y mandar al carajo sus aspiraciones políticas hasta el 2030, tendrá que enfrentar ahora el desorden legal que provocó al ausentarse del gobierno de Nuevo León.
Y es que todavía existe la controversia que aún está vigente la licencia que solicitó al Congreso local por un periodo de seis meses y que pone en entredicho su retorno a la gubernatura.
Lo que todo mundo se pregunta es ¿porqué si estaba seguro de ganar la presidencia en el 2024 decidió declinar a sus aspiraciones y retomar el control de su estado?
¿Porqué se aferraba a poner a un incondicional en su lugar, si presume que en su gobierno hay transparencia y cero corrupción?
El ‘cachorro’ de León en sus sueños quizá también se la creyó que llegaría a la grande hasta que despertó a la realidad: un lacayo del régimen.
