Inicio Nacional Pandemia ha matado en México mil 744 profesionales de la salud por...

Pandemia ha matado en México mil 744 profesionales de la salud por falta de equipos de protección

599
0

La falta de equipo de protección al inicio de la epidemia, la insuficiente capacitación para su uso adecuado y el rezago en infraestructura son las principales causas que han contribuido al fallecimiento de mil 744 profesionales de la salud en México, 854 de ellos personal médico, coinciden especialistas.

Este número es casi equivalente a la cantidad de médicos generales y especialistas que hay en Campeche, que asciende a 992, y duplica el número de estudiantes aceptados en la carrera de médico cirujano de la Facultad de Medicina de la UNAM, la FES Iztacala y la Zaragoza que ascendió a 388 el año pasado.

En un País donde sólo hay 0.6 médicos por cada mil personas sin seguridad social, cada pérdida de un profesional agrava el déficit.

Tan sólo en 8 entidades del sur de México se requieren 64 mil 796 médicos generales y especialistas para alcanzar el promedio de la OCDE, que es de 3.2 médicos por cada mil habitantes.

José Ángel Córdova, ex Secretario de Salud, lamentó que los decesos, en un inicio, se hayan debido a que faltaron los medios para protegerse.

«Es muy triste y lamentable y sobre todo cuando esto sucedió porque los medios que les dieron para protegerse fueron insuficientes.

«Uno, cuando ya está ahí en el campo de batalla, es rarísimo que alguien diga: ‘Yo así no le entro, porque necesito estar más protegido’. Usa uno lo que tiene y atiende a los enfermos de la mejor manera. En el caso del coronavirus si no hay una protección amplia el riesgo de contagiarse es muy importante, y de morir también», señaló.

Consideró que tomará décadas recuperar la formación y experiencia perdida con estos profesionales.

Detalló que sólo para formar a un médico general se requieren 7 años de instrucción y hay que agregar entre 3 y 7 años más en caso de los especialistas y una inversión de 100 mil pesos por año de formación de cada médico.

En el marco del Día del Médico, que se celebra el 23 de octubre, Juan Luis Mosqueda, director del Hospital Regional de Alta Especialidad del Bajío, estimó que los doctores de las distintas instituciones de salud enfrentaron la epidemia de Covid-19 bajo circunstancias contrastantes.

«(Había) lugares donde prácticamente nadie sabía usar (el equipo, y) lugares donde la totalidad estaba capacitado», advirtió.

Precisa que los hospitales de tercer nivel de atención -de alta especialidad-, así como los institutos nacionales suelen tener la mayor capacidad, mientras que «hospitales de provincia» -de segundo nivel de atención- tienen una menor preparación.

El problema es que la situación heterogénea en las distintas instituciones de salud tanto públicas como privadas, implica que hubo hospitales que al inicio de la epidemia tenían poco equipo de protección personal o éste era de calidad inadecuada.

Agrega que durante estas contingencias se tiene claro que el personal más afectado siempre es el de salud, y es el primero en contagiarse.

Pero no se trata de que caminen hacia el precipicio, es decir, las instituciones de salud donde ejercen, son responsables de proveerles lo necesario para su protección adecuada; aunque no es posible evitar el contagio, sí existe la forma de disminuir el riesgo, dice.

Mosqueda afirma que una de las esencias principales de los médicos mexicanos, y lo que los hace diferentes de especialistas de otras naciones, es su vocación y valentía, así que pese a las condiciones en las que les ha tocado hacer frente a esta contingencia sanitaria no han dado marcha atrás.

Considera que ante su entrega y compromiso en la contingencia, el personal de salud debe calificarse como héroe.

«Sabiendo el riesgo; sabiendo que incluso a veces no hay las condiciones en algunos lugares, no abandonaron su vocación y compromiso a la población.

«El personal médico no es un héroe como el de las películas que tiene súper poderes y es inmortal, así es fácil. Son héroes verdaderos porque hacen su labor sin tener súper poderes».

El director general del Hospital Regional de Alta Especialidad del Bajío asegura que la epidemia de influenza AH1N1 debió dejar lecciones aprendidas para evitar que, con Covid-19, el personal de salud fuera tan afectado; pero no sucedió así.

«La protección hacia el personal y la disposición de todo lo necesario debe ser uniforme en todas las instituciones. Una lección aprendida (tras la epidemia de AH1N1 en 2009) debió haber sido el tener equipo de protección personal de manera permanente, pero además disponible para un uso adicional ante la presencia de contingencias como éstas».

El especialista indica que tampoco se aprendió sobre contar con protocolos para la reconversión hospitalaria para ampliar la capacidad de camas de terapia intensiva.

«Una tercera lección aprendida tendría que haber sido el tener suficiencia de ventiladores. Desde 2009 se debió planear una reserva estratégica».

Indica que esto debe estar listo ante la recurrencia de las pandemias «Vamos a cerrar ésta y vendrá otra; es algo que debemos asumir».

Para el experto, otra situación por la que se vio más afectado el personal de salud son las comorbilidades en éste.

«Llama la atención que entre el personal de salud haya personas con sobrepeso, obesidad. Hay males que no se pueden evitar como tener diabetes e hipertensión, el problema es tenerlas mal controladas y claro que afecta; no es lo mismo enfermarnos estando sanos que teniendo un problema de salud crónico».

El especialista considera que una forma de honrar la memoria de los médicos caídos es tener lecciones aprendidas.

«Debemos generar lecciones aprendidas. Debemos implementar planes de preparación en los hospitales; tener reservas de equipo protección; de ventiladores; así habremos honrado su memoria».

Afirma que en el hospital que dirige no se registraron fallecimientos y de los mil 800 trabajadores con los que cuenta sólo ha habido 150 enfermos, y sólo cinco requirieron hospitalización.

Para Víctor Hugo Borja, director de prestaciones médicas del IMSS, otra problemática que influyó en la pérdida de profesionales fue el rezago que hay en infraestructura de salud.

«Lo que nos faltó es lo que no teníamos previamente y lo tuvimos que adquirir a una velocidad muy rápida».

De acuerdo con el mapa de Amnistía Internacional sobre decesos de personal de salud, con cifras hasta agosto pasado, México se mantiene con el mayor registro de decesos en esta población a nivel global, por arriba de EU con 1077 y Brasil con 634.

A LA CABEZAMuertes en personal de salud, de acuerdo con el mapa actualizado de Amnistía internacional:

EN AMÉRICA

*México 1320 (25 de agosto) EU 1077 (26 de agosto) Brasil 634 (25 de agosto) El Salvador 104 (29 de julio) Nicaragua 104 (12 de agosto) Argentina 80 (28 de agosto) Guatemala 47 (3 de agosto) Chile 27 (31 agosto) Canadá 17 (12 de agosto) Honduras 10 (12 de agosto) Costa Rica 2 (12 de agosto) Panamá 3 (12 de agosto) (Reforma).