Por: Jesús Torres
No relajar medidas contra pandemia
Cuando en el mundo se reportan más de 3 millones de personas infectadas por el Covid-19, y las muertes ya superan las 200 mil, en México existen ya claras intenciones de ir normalizando las actividades económicas y productivas con todo y que todavía falta un mes de confinamiento, lo que podría desencadenar una catástrofe en materia de salud.
En estos tiempos de emergencia no se pueden relajar las medidas sanitarias para que el daño económico sea menor, como lo está proponiendo el presidente, Andrés Manuel López Obrador, máxime que la curva por el número de casos positivos no ha bajado desde que el país entró a la Fase 3 de la pandemia.
Prueba de ello es que la incidencia de contagiados por el virus sigue a la alza y ya supera los 16 mil el número de confirmados así como más de mil 500 los fallecidos en todo el país.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha advertido que poner fin al aislamiento por el coronavirus de forma precipitada puede tener un impacto económico mayor.
Y es que la OMS aún ve lejos que termine la pandemia y observa con preocupación la tendencia creciente del número de infectados en América Latina, África, Europa Oriental y algunos países asiáticos.
Sería muy arriesgado y lamentable que el gobierno de López Obrador optara por salvar la economía de este país en vez de la salud de todos los mexicanos.
Es cierto que la parálisis de las actividades no esenciales está llevando a México a una de sus peores crisis financieras previstas para el cierre de año con la perdida de alrededor de 2 millones de empleos y la caída del Producto Interno Bruto (PIB), de hasta un 6 por ciento, pero nada de eso vale más que la vida humana.
Cancelar proyectos como la Refinería, el Tren Maya y el aeropuerto de Santa Lucía, quizá sea en estos momentos la opción más viable para orientar esos recursos hacia estrategias de recuperación económica y programas de apoyo ante la crisis que se vive por la pandemia. Ahí hay mucho dinero del que se puede echar mano para salvar este país, tanto en lo económico, como en lo social y lo humano.
Primero es la salud de todos, lo demás, viene detrás.
