Villahermosa, Tabasco; 18 de noviembre de 2025.- En un estado como Tabasco —región estratégica por su enorme riqueza de agua dulce y ecosistemas vitales como los Pantanos de Centla—, la discusión nacional sobre la nueva Ley General del Agua tomó un giro urgente; la propuesta impulsada por el gobierno federal morenista es “profundamente lesiva” para quienes producen: campesinos, ganaderos, agricultores, usuarios de riego y comunidades rurales que dependen del recurso para vivir.
Durante el foro realizado en Tabasco, el coordinador del PRI en San Lázaro, Rubén Moreira, advirtió que la iniciativa afectará directamente a miles de familias cuyo patrimonio y sustento se encuentran en el agua. Señaló que aprobar la reforma “al vapor”, sin consultas reales ni análisis técnico, constituye un agravio para quienes trabajan la tierra. Por ello, explicó, el PRI impulsa parlamentos abiertos en todo el país para evitar una reforma impuesta desde el centralismo y desconectada de la realidad productiva.
“Esta iniciativa atenta contra le seguridad nacional, se frena el crecimiento y arriesga la seguridad del abasto del vital líquido”, enfatizó el Moreira Valdez, en presencia de productores de las cuatro regiones de la entidad y la presencia del Diputado Federal Erubiel Alonso Que, el Presidente del PRI Tabasco, Miguel Barrueta Cambrano, la dirigente nacional de la CNC, Diputada Federal Leticia Barrera Maldonado, el Delegado del CEN del PRI, Pedro Gutiérrez Gutiérrez, el dirigente del PRD en Tabasco, Rafael Acosta León, el ponente Ingeniero Agrónomo Especialista en Irrigación por la Universidad Autónoma Chapingo, José Reyes Sánchez, entre otros.
*ES UNA MALA LEY: LETICIA BARRERA*
Durante el Foro sobre la nueva Ley General del Agua que fue moderado por la Secretaria General del CDE del PRI, Mari Carmen García May, en su intervención, la dirigente nacional de la CNC, Leticia Barrera Maldonado, coincidió en que la reforma de Morena ignora la situación del campo y agrega cargas sin ofrecer soluciones. Recordó que regiones como Tabasco, afectadas cada año por crecientes, desbordamientos e inundaciones, requieren una legislación técnica, no un articulado construido desde la prisa o el desconocimiento. “Una mala ley puede destruir producción, empleo y estabilidad ambiental”, advirtió.
*LAS VOCES DEL CAMPO LLEGARÁN AL CONGRESO: ERUBIEL ALONSO*
El Diputado Federal Erubiel Alonso Que afirmó que todas las propuestas generadas en este foro “se harán escuchar en la máxima tribuna del país”, subrayando que la defensa del agua no es un tema político, sino una responsabilidad con las familias mexicanas. Señaló que no permitirán una reforma que vulnere la seguridad hídrica ni que transforme el acceso al agua en un mecanismo impositivo, como pretenden los morenistas hoy en día.
Enfatizó que desde la Cámara de Diputados seguirán impulsando un México libre, justo y con acceso equitativo al agua, donde las decisiones se construyan con la voz de productores, especialistas y ciudadanos, y no desde la imposición. Reiteró que el PRI está listo para dar la batalla legislativa en defensa de un recurso que pertenece a todas y todos los mexicanos.
*IRRESPONSABLE LEGISLAR SIN ESCUCHAR AL PUEBLO: MIGUEL BARRUETA*
Por su parte, el dirigente estatal del PRI, Miguel Barrueta Cambrano, destacó que en un estado donde el agua es eje económico y social, legislar sin escuchar a quienes la usan es una irresponsabilidad.
Finalmente, el Delegado del CEN de la CNC, Ramón Cornelio Gómez, expuso que los productores participantes en el foro —provenientes de todo Tabasco— coincidieron en una misma preocupación: la reforma podría dejar aún más indefensos a los productores y afectar directamente la vida rural y urbana del país.
Los participantes coincidieron en que es indispensable actualizar la legislación en materia de agua para mejorar la tecnificación, la protección y el uso responsable del recurso; sin embargo, advirtieron que la reforma no puede aprobarse al vapor ni sin escuchar a los productores, porque una ley mal construida podría quebrar a quienes trabajan el campo, agravar la vulnerabilidad hídrica y poner en riesgo tanto la producción como el abasto en regiones altamente sensibles como Tabasco.








