El asesinato de un policía por parte de un supuesto islamista hizo que la seguridad nacional figurara en el tope de la agenda política francesa el viernes, dos días antes de la primera vuelta de la elección presidencial, mientras los candidatos debatían sobre cómo mantener seguros a los ciudadanos.
La candidata de extrema derecha Marine Le Pen, una política euroescéptica que quiere que su país deje de usar el euro, aprovechó el tiroteo en París para defender sus políticas en seguridad nacional.
Le Pen, que sigue de cerca en los sondeos al centrista y favorito Emmanuel Macron, dijo que adoptará medidas para derrotar al «terrorismo islamista» si es elegida, incluyendo la aplicación de controles fronterizos e inmigratorios más estrictos.
Macron, un ex ministro de Economía del Gobierno que Le Pen ha criticado reiteradamente por su historial en seguridad, dijo que las soluciones no son tan simples como sugiere su principal contrincante.
Tras la primera vuelta del domingo, dos de los cuatro candidatos con mayor arrastre popular pasarán a una segunda ronda electoral que se disputará el 7 de mayo.
La primera encuesta realizada tras los ataques del jueves mostró un avance de un punto porcentual de Le Pen, a un 23 por ciento, pero Macron seguía líder pese a una baja de medio punto porcentual a un 24,5 por ciento.
El conservador Francois Fillon, un ex primer ministro, y el izquierdista Jean-Luc Mélenchon retrocedieron medio punto a un 19 por ciento de las preferencias, según el sondeo Odoxa para el periódico Le Point.
El atentado en los Campos Elíseos fue el más reciente en una serie de ataques perpetrados por militantes islamistas en Francia en los últimos años, que han dejado más de 200 muertos.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, escribió en Twitter que el tiroteo influirá en la elección presidencial francesa. «Otro ataque terrorista en París. El pueblo de Francia no tolerará mucho más de esto. ¡Tendrá un gran efecto en la elección presidencial!», tuiteó Trump.
Tras realizar una reunión de emergencia con funcionarios de seguridad, el primer ministro galo, Bernard Cazeneuve, dijo que las fuerzas de seguridad, incluyendo a unidades de élite, estaban en alerta para respaldar a 50.000 policías designados para garantizar la seguridad de la ciudadanía durante la elección. (Reuters).