Después de que Donald Trump asumiera la Presidencia de los Estados Unidos y mencionara reiteradamente amenazas relacionadas con México, la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo convocó a su gabinete federal a una reunión para abordar el tema migratorio.
Mientras tanto, los migrantes en la frontera quedaron a la deriva tras la caída de la plataforma CBP One y el cierre del paso, por ejemplo, en Ciudad Juárez se vieron escenas plenas de drama con gente llorando.
El mensaje contundente de Donald Trump, centrado en detener la migración ilegal hacia Estados Unidos, reforzar la seguridad fronteriza, continuar la construcción del muro en la frontera norte y restablecer el programa “Quédate en México”, generó una reunión de urgencia por parte del gobierno mexicano. La presidenta Sheinbaum convocó a su gabinete para definir la postura oficial ante estas declaraciones.
Paralelamente, en la Ciudad de México, comenzaron manifestaciones frente a la embajada estadounidense, reflejando el descontento de diversos sectores.
Entre las primeras medidas adoptadas por el gobierno de Donald Trump se encuentra el cierre del puerto de entrada de “El Paso, Texas”. La policía estatal procedió a cerrar este punto poco después de la toma de posesión del presidente Trump y tras el cierre de la plataforma CBP One.
La plataforma CBP One, que era utilizada por migrantes en México para programar citas con las autoridades estadounidenses con el fin de solicitar ingreso al país, dejó de funcionar el 20 de enero, poco después de la toma de protesta de Donald Trump. En un principio, las citas programadas para las 11:00 fueron reprogramadas para las 13:00 horas. Sin embargo, la inesperada interrupción de la plataforma dejó en incertidumbre a los migrantes presentes.
Versiones no oficiales mencionan que los migrantes ya recibieron un correo electrónico donde oficialmente se les ha cancelado su cita.
La plataforma CBP One cumplía diversas funciones, siendo la principal la programación de citas para migrantes que, sin los documentos necesarios para ingresar a los Estados Unidos, podían enviar información anticipada y agendar una cita para presentarse en determinados puertos de entrada.
Para asistir a su cita, los migrantes debían estar en la frontera norte, ser entrevistados y tener la posibilidad de ser admitidos o rechazados en Estados Unidos. Sin embargo, tras el discurso de Donald Trump como presidente de los Estados Unidos, en el que afirmó que otros países estaban enviando a sus “criminales” a cruzar la frontera, los servicios de CBP One fueron suspendidos.
Migrantes de diversas nacionalidades, que ya estaban formados para asistir a sus citas, quedaron a la deriva mientras Trump continuaba su discurso, donde prometía que Estados Unidos “volverá a ser grande” y que dejaría de ser “saqueado” por extranjeros.
En la frontera, se observan familias y personas de todas las edades, desconcertadas y sin alternativas claras, mientras esperan una respuesta sobre las citas previamente programadas. Muchos sostienen que aún cuentan con documentos que acreditan dichas citas, pero Trump anunció durante su discurso la implementación del programa “Quédate en México”, que implica la permanencia de migrantes en territorio mexicano hasta que se defina su situación.
LA FRONTERA SUR TAMBIÉN CANCELA CITAS
El problema no se limita a la frontera norte de México. En la frontera sur, la situación también es crítica. La oficina de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (COMAR) en Tapachula, Chiapas, colapsó debido a la afluencia masiva de migrantes, principalmente de Haití, que buscan documentos para continuar su viaje hacia Estados Unidos.
Un trabajador de la COMAR salió con un megáfono para informar que, debido a la toma de protesta de Donald Trump como presidente de los Estados Unidos, las citas para entrevistas estaban suspendidas temporalmente y que los migrantes debían seguir con sus citas semanales programadas. Esto se da en un contexto en el que Trump ha anunciado una política de deportaciones masivas para los migrantes irregulares en su país.
MÉXICO SE PREPARA PARA UNA OLA DE MIGRANTES
Pese a que la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo ha expresado su deseo de mantener una buena colaboración con el gobierno de los Estados Unidos y preservar la autonomía de México, su administración también se está preparando para enfrentar la esperada ola de migrantes.
“Tenemos la certeza de que llegaremos a un acuerdo con el gobierno del presidente Trump. Una vez que se consolide su toma de posesión, se establecerán los canales adecuados para una comunicación efectiva”, señaló la mandataria durante su conferencia de prensa este 20 de enero.
Asimismo, destacó: “México ha estado trabajando en una estrategia integral y humanista para atender a los migrantes que buscan llegar a Estados Unidos. Esto ha permitido que menos migrantes lleguen a la frontera norte”.
En relación con la reciente cancelación de la aplicación CBP One, la presidenta Sheinbaum mencionó que ya se habían recibido advertencias sobre el cese de operaciones de dicha plataforma. Sin embargo, expresó confianza en que se desarrollará una herramienta similar que permita a los migrantes gestionar sus citas de manera efectiva.
“Nosotros uno de los temas que vamos a plantear es que se permita, sea esta aplicación u otras aplicaciones, que podamos tener un esquema similar para que, desde un país de Centroamérica o desde sus propios países o en el sur de México, pueda seguir habiendo esta posibilidad de acceder a la aplicación. Esto ayuda mucho para evitar la presión fronteriza en el norte de nuestro país y en el sur de los Estados Unidos, la frontera México-Estados Unidos, entre otros temas relacionados con la migración”.
Mientras que la secretaria de gobernación, Rosa Icela Rodriguez, mencionó que se implementaría el plan “México te abraza” con la intención de dar apoyo a los migrante mexicanos y extranjeros que sean deportados. “El @GobiernoMX está preparado con la estrategia efectiva de recepción #MéxicoTeAbraza, para recibir, de ser necesario, a nuestros connacionales y vincularlos a programas sociales y servicios. Haremos todo lo necesario para defenderlos y atenderlos. Y se destinará lo que haga falta para lograr su reintegración a su país natal”.
Respecto a los mexicanos repatriados, mencionó que cada persona repatriada recibirá una Tarjeta Bienestar Paisano con 2 mil pesos para ayudarles a costear su traslado a casa. Además, serán inscritos en programas sociales como la pensión para adultos mayores, apoyos a madres trabajadoras y Sembrando Vida. También el IMSS los afiliará para que tengan acceso a atención médica, guarderías y seguro de retiro.
(emeequis).