Los diputados federales del PRI, encabezados por el coordinador Rubén Moreira Valdez, votaron en contra de la Ley de Ingresos ya que no garantiza un crecimiento estable, transparente y eficiente, cuando el monto que se pagará por intereses de la deuda es mayor al que se destinará a los estados y municipios.
Al posicionar a nombre de la bancada priista, el diputado federal Jericó Abramo Masso precisó que el monto de la deuda que se autoriza en este paquete económico es de 1.5 billones de pesos y señaló que, en el año 2022, los intereses de la deuda de México fueron 580 mil millones de pesos.
Advirtió que para el 2025, se pagará 1 billón 388 mil millones de pesos de intereses, no de capital, de intereses, mientras que los municipios y estados recibirán de participaciones un billón 350 mil millones de pesos, es decir, se le dará más dinero a los bancos que a las entidades federativas.
“Fuera máscaras, no podemos engañar a los mexicanos con sobreestimar el crecimiento económico, estamos poniendo el precio del barril de petróleo a 57 dólares cuando está a 72”, subrayó Abramo Masso,
Agregó que se estima el tipo de cambio en 18 pesos, cuando hoy amaneció a 20.65, por lo que pidió no jugar con los números, ya que México requiere equilibrio fiscal, y orden, enfocarse en mejorar la infraestructura.
En su oportunidad, Emilio Suárez explicó que esta Ley de Ingresos 2025 aumenta la incertidumbre económica al priorizar proyectos centralistas sin rumbo, como la refinería de Dos Bocas, mientras recorta fondos a salud, obra pública y estados.
“Ahora se plantean recortes en sectores clave, las empresas públicas del Estado y los organismos de control presupuestario, lo cual pondrá en riesgo el desarrollo económico del país al reducir la competitividad y limitar el acceso a servicios básicos afectando a las personas más vulnerables”, expresó.
Advirtió sobre proyecciones fiscales irreales y su impacto en servicios básicos y competitividad, al tiempo en que hicieron un llamado a replantear el paquete económico para enfrentar los desafíos con mayor responsabilidad.
Denunció que el paquete económico propuesto recorta un 1.2 por ciento las transferencias federales y un 4.6 por ciento las aportaciones a estados y municipios, poniendo en riesgo servicios públicos esenciales en regiones como Guerrero, Oaxaca y Campeche.
Criticó que estos recortes financiarán proyectos prioritarios del gobierno, mientras que las administraciones locales enfrentarán graves deficiencias en áreas clave, por ello llamó a fortalecer el federalismo y mejorar la recaudación local sin dejar a los estados en insolvencia.
Los legisladores priistas hicieron un llamado a cumplir las expectativas de crecimiento para el 2025, pues el PRI, dijeron, no puede acompañar esta propuesta de política económica y fiscal que resulta nociva y contraproducente.