El delantero senegalés del West Ham, Diafra Sakho, fue detenido el pasado domingo por la noche como sospechoso de proferir amenazas de muerte e intimidaciones a su antigua pareja, informó hoy la Policía Metropolitana de Londres.
Sakho, de 25 años, que ya fue interrogado en la capital británica a comienzos de agosto por un caso similar, fue puesto en libertad bajo fianza.
Sin embargo, desde el entorno del jugador senegalés se han apresurado a desmentir las informaciones. El diario ‘The Sun’ recoge declaraciones de un portavoz del jugador.
“Diafra Sakho no ha sido acusado de ningún delito. Niega rotundamente las acusaciones que se han hecho contra él. Ya ha dado a la policía una explicación completa de los hechos y no va a hacer más comentarios”, dijo de forma taxativa.
Por su parte, desde el club defienden la versión del futbolista y no piensan tomar medidas, por ahora. De hecho, el entrenador del equipo, Slaven Bilic, ya ha asegurado a la prensa que seguirá contando con el delantero para sus convocatorias y alineaciones. «Tiene una buena actitud y entrena con normalidad», justificó el técnico ante las preguntas de los periodistas.