A nivel nacional el municipio de Centro tiene los mejores instrumentos y capacidades para regular el gasto y medir los resultados de un ayuntamiento, asegura la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) en un diagnóstico reciente.
Cada año la SHCP, en coordinación con las entidades federativas y los municipios del país, realiza un diagnóstico para conocer el nivel de las capacidades municipales para llevar un control del presupuesto basado en resultados y un sistema de evaluación del desempeño. Es decir, se evalúa cuáles son los municipios que mejor llevan sus cuentas.
Como todos sabemos, recientemente fue necesario poner dientes a la Ley General de Contabilidad Gubernamental para evitar que los ayuntamientos ejercieran sus presupuestos sin control y rendición de cuentas, guiados por ocurrencias, caprichos, corrupción, opacidad y alejados del interés ciudadano.
El diagnóstico 2017 de la SHCP, refleja la evaluación de los municipios de acuerdo a las metas cumplidas y la eficiencia con que se ejercen los recursos públicos en las alcaldías del país. En ese sentido, el análisis del municipio de Centro, revela que el ayuntamiento capital ha mejorado notablemente su disciplina financiera, sus procesos de ejercicio del gasto, evaluación y seguimiento. En otros términos, la SHCP reconoce la transparencia y un presupuesto basado en resultados por parte del municipio de Centro; un ayuntamiento que ejerce el gasto apegado al presupuesto y cumpliendo con la ley.
Los resultados colocan al municipio en el sexto lugar de 64 municipios evaluados. El ayuntamiento destaca por su sobresaliente desempeño en materia de contabilidad gubernamental, ya que escaló dieciséis lugares con relación al diagnóstico de 2015. En pocas palabras, Centro se consolida como un municipio que lleva bien las cuentas públicas y rinde buenas cuentas a los ciudadanos.
Al respecto, el alcalde Gerardo Gaudiano Rovirosa, celebró el informe de la SHCP sobre la Implementación del Presupuesto Basado en Resultados, que ubicó a Centro en el 6º lugar nacional con 59.2 por ciento en 2017, después de ocupar el 24º lugar en la medición 2015, destacando los beneficios directos en la calidad de vida de la población.
