La firma de moda italiana Armani cerró esta semana con el equipo de Fórmula Uno Ferrari un acuerdo de varios años para vestir con sus trajes a los pilotos, el español Carlos Sanz y Charles Leclerc, así como a la cúpula directiva, en las actividades fuera de la pista, con el objetivo de sostener mutuamente la “marca Italia” en tiempos de crisis por el coronavirus.
Si el rojo es la marca inconfundible de la Escudería de Maranello en los GP, Sainz y Leclerc llevarán trajes azules marino en sus viajes, los eventos en los que participen y las entrevistas, informó Ferrari al oficializar el acuerdo con Armani.
“En ocasión de los eventos oficiales los pilotos Charles Leclerc y Carlos Sainz y los directivos de la Escudería llevarán prendas seleccionadas y una colección de accesorios firmados Giorgio Armani”, destaca el equipo dirigido por Mattia Binotto.
“Buscar la excelencia y la atención por cada detalle son valores comunes de dos símbolos de campeones como Ferrari y Giorgio Armani”, agrega.
Sainz, que debutó el pasado enero en el monoplaza Ferrari y que se prepara para estrenarse en el GP de Bahrein el próximo 28 de marzo, participó junto a su compañero Leclerc en la presentación del patrocinio y fue fotografiado con un elegante traje azul marino, camisa blanca y corbata azul con puntos blancos.
Un estreno de las prendas Armani que se celebrará a finales de marzo, en las actividades y eventos previos al comienzo del Mundial de 2021 en Bahrein, donde ya se encuentran tanto Carlos Sainz como Leclerc.
Ambos afrontan la nueva temporada con ambición de crecer tras la extremadamente negativa campaña vivida en 2020 por Ferrari.
La Escudería italiana reconoció que este año seguirá siendo difícil pensar competir por el Mundial, que le falta desde 2007, pues el margen con el británico Lewis Hamilton (Mercedes) sigue siendo muy importante.
Confía, sin embargo, en construir un coche y un equipo muy competitivo para el Mundial de 2022, que según reconoció repetidamente Binotto debe marcar definitivamente el renacimiento de Ferrari.
En tiempos de profunda crisis económica causada por el coronavirus, Ferrari decidió colaborar con Armani para sostener mutuamente a las empresas italianas.
“Hoy más que nunca hay que trabajar en equipo, promover la excelencia italiana en un diálogo entre distintas áreas. Ferrari es un símbolo reconocido de Italia en el mundo y estoy orgulloso por esta colaboración. Vestí a los pilotos con unas prendas elegantes adecuadas a sus viajes, esperando que todos podamos volver a viajar“, afirmó Giorgio Armani.
En la misma línea se movió John Elkann, presidente de Ferrari: “Armani es sinónimo de estilo y elegancia italiana. Compartimos el mismo orgullo por representar a nuestro país en el mundo. Desde hoy Escudería Ferrari y Giorgio Armani se alían para ser más fuertes juntos, no solo en el circuito“.
Armani amplió de esta manera su presencia en el mundo del deporte, que ya le ve colaborar con el basquetbol, la gran pasión del diseñador italiano, el futbol o el equipo olímpico de su país.
Desde hace trece años Armani es dueño del Olimpia Milán, el equipo más ganador del baloncesto italiano con 28 títulos nacionales, al que patrocinó con sus marcas Armani Jeans, Emporio Armani o Armani Exchange.
El equipo milanés está dominando la liga italiana y busca conquistar su vigésima novena corona nacional con Ettore Messina, ex del Real Madrid, en el banquillo.
Además, Armani renovó en 2019 por cuatro años su acuerdo de patrocinio con la selección de futbol italiana, cuyos jugadores, técnicos y directivos, llevan sus trajes en las actividades extra futbolísticas.
El equipo italiano del Comité Olímpico Nacional (CONI) también usa las prendas del diseñador italiano y las lucirá el próximo verano en los Juegos Olímpicos de Tokio. (EFE).