Testigo fiel
Por: Jesus Torres
AMLO, a favor de la reforma energética
El candidato de Morena, Andrés Manuel López Obrador no deja de sorprender todos los días, su postura contra el actual régimen de gobierno ya no sólo es la misma, las contradicciones en las que ha venido cayendo el originario de Macuspana lo ponen ahora del lado de lo que tanto criticó.
Vea por qué se lo decimos, a principios de diciembre de 2013 el tabasqueño sufrió un infarto en víspera de encabezar una movilización contra la reforma energética que estaba a punto de ser aprobada en el Senado de la República.
Después de casi cinco años de haber entrado en vigor la iniciativa del presidente, Enrique Peña Nieto que abrió el sector petrolero a empresas extranjeras, López Obrador no sólo dijo que se trataba del más grande robo de todos los tiempos sino que utilizó el tema como bandera para sacar raja política en sus aspiraciones rumbo a las elecciones de este año.
Pero, ¿qué habrá hecho cambiar de opinión al morenista al grado de dar un giro se 180 grados a su postura?
Y es que de acuerdo con el empresario Alfonso Romo, uno de los principales consejeros en su equipo de campaña, el aspirante presidencial de Morena ha concluido que las licitaciones derivadas de la reforma energética promulgada por el presidente Peña Nieto son benéficas para el país y, por tanto permitirá que sigan su marcha.
Y no sólo eso, el abanderado morenista no buscará nacionalizar compañías si gana la elección presidencial de julio próximo.
¿Qué dirá ahora AMLO a sus seguidores?pues había prometido que de llegar a la presidencia revisaría los contratos petroleros que el país ha firmado tras la apertura del sector, y que intervendría en la industria para evitar que la producción de hidrocarburos local siga en declive.
También había asegurado que hablaría con Peña Nieto para detener sus afanes privatizadores.
“Ya no queremos que se sigan entregando bienes del pueblo y de la nación a particulares nacionales o extranjeros, no es posible que se llegue a tanta irracionalidad, sólo por la ambición al dinero», así pregonaba López Obrador a los cuatro vientos.
Al tabasqueño ya se le olvidó cuando señalaba que si se privatizaba Pemex se cancelaba en definitiva el futuro para millones de mexicanos. Que alguien me explique.
