Para Usted
AALH: “Primero Muerto, que Confeso”
Mario Gómez y González
chayogomezg@hotmail.com
De verdad, ¿ustedes creen que Adán Augusto López Hernández, actual secretario de gobernación y, detrás del telón, gobernador de Tabasco, vaya a reconocer, mediante un acto de entera contrición, besando la cruz y poniendo su mano sobre la biblia, que anda en campaña presidencial?
Desde luego que no; es más, seguramente diría para sus adentros; “primero muerto que confeso”, por lo que seguirá negando que sus visitas a los congresos locales de todos los estados de la república, sea para concientizar y sensibilizar a los legisladores locales, en torno a la permanencia de los soldados en las calles del país hasta el año 2028.
Si tonto no es, el buen Adán Augusto, para reconocer el verdadero motivo de su recorrido por todo el país; necesita darse a conocer como requisito indispensable y hasta técnico, para aspirar a la candidatura de Morena a la presidencia de la república en el 2024.
Por eso llamaron la atención sus recientes declaraciones, en el marco de su visita al estado de Colima, cuando aseguró que su presencia en los Legislativos estatales, no se trata de una gira proselitista y promoción personal, sino de presentación de la reforma constitucional que permitirá la permanencia del Ejército en las calles hasta 2028.
Y remató, con la espontaneidad y dulzura que lo caracteriza: “No ando en campaña presidencial, a lo mejor ya mero”, dejando entrever claramente que, “a lo mejor, ya mero sí”, durante los próximos meses, podría iniciar su campaña de proselitismo electoral en busca de la presidencia de la república, bajo el cobijo del partido oficial Morena.
Mientras tanto, insistió en que se trata de un “ejercicio democrático que no se vio y ni se ha visto nunca en la historia de este país”, para exponer las modificaciones constitucionales a las legislaturas locales; si tonto no es, como para hacerse el haraquiri; aunque, es evidente que la oposición, incluso las otras corcholatas morenistas, están registrando y archivando todo esto, para de no ser ellos los elegidos, entonces sacarlo a la luz, de modo que el Instituto Nacional de Elecciones (INE) y el Tribunal Federal de la especialidad (TFPJF), apliquen la ley. ¿Verdad, Ricardo Monreal, et al?
Morena: ¿Más de lo Mismo o Peor de lo Mismo?
Es cierto, los tabasqueños están totalmente decepcionados; se sienten engañados y burlados por los actuales gobiernos de Morena, que en campaña les prometieron que las cosas cambiarían; que ellos no serían más lo mismo; que sabían cómo resolver las cosas y encabezar buenos gobierno, pero la realidad es otra y totalmente distinta a las ilusiones y esperanzas que vendieron.
A los tabasqueños, les quedaron a deber estos neo-morenistas o más bien, “morenistas de ocasión”, pues son los mismos que por años han desfilado por los cargos públicos y por los espacios de representación popular; Morenistas puros y auténticos, prácticamente no los hay en los gabinetes; solo advenedizos que se olvidaron de sus compromisos con el pueblo.
Los resultados ahí están; los datos duros también ahí están; ningún tabasqueño se puede decir engañado, pues la actual realidad de la entidad y de sus habitantes es peor de cuando gobernaban otras instituciones políticas; el primer gobierno de izquierda en la historia de Tabasco (con Arturo Núñez Jiménez), fue un verdadero fiasco; el actual, el de Adán Augusto y Carlos Merino, “no cantan mal las rancheras”, pues se van tomaditos de la mano.
Y es que, durante el proceso electoral del 2018, los tabasqueños acudieron a las urnas para votar por un fenómeno social (Andrés Manuel López Obrador), porque quería el cambio y le hicieron creer a la gente que el neoliberalismo era el causante de todo lo malo, pero la realidad es que, la Cuarta Transformación (4T), no ha hecho nada.
La realidad, es que los de la 4T, hicieron creer a los tabasqueños que encabezarían gobiernos sin corrupción y que harían gobiernos ejemplares; pero la realidad ha demostrado que han sido unos gobiernos malos y condenados al más rotundo de los fracasos; la corrupción, la negligencia, el valemadrismo, la opacidad, la impunidad, entre otras, han sido sus principales características.
No fueron la esperanza de México y, mucho menos de Tabasco; no cambiaron las cosas, sino que empeoraron y no fueron los mejores en el ejercicio del poder, sino que lo hicieron mal y no reconocen sus errores; los actuales escenarios, dan evidencia de todo.
Los Malosos** disfruten ustedes el puente de los primeros días de noviembre** si Dios lo permite, nos leemos la semana entrante, o antes si sucede algo extraordinario**fue todo por hoy**hasta entonces.