La Confederación de Cámaras Industriales (Concamin) dará seguimiento y ayudará a reducir los índices de obesidad en México, mediante su participación en el Observatorio Ciudadano, a fin de cambiar la tendencia que tiene México hoy en este tema.
El presidente de la Comisión de Salud de la Concamin, Raúl Riquelme, dijo que el observatorio analizará y dará seguimiento a las acciones que se definieron en la Estrategia Nacional para la Prevención y el Control del Sobrepeso, la Obesidad y la Diabetes.
En entrevista con Notimex, destacó que el Observatorio Ciudadano “se trata de un órgano administrado en su concepción por la Universidad Autónoma de Nuevo León, el cual dará un seguimiento puntual a los indicadores que propusieron diversos expertos en la materia”.
La herramienta podrá identificar si todas las acciones, entre las que destacan etiquetado claro en productos, publicidad responsable, impuestos y la correcta promoción de la actividad física, entre otras, están teniendo resultados favorables.
“En la Concamin tenemos una participación permanente en este ejercicio, que es de largo aliento, ya que se prevé que los efectos de esta estrategia se puedan notar y revisar en periodos de cinco a 10 años, pero hay que darles seguimiento”, abundó.
El objetivo es cambiar la tendencia que hoy tiene este tema en México, con el primer lugar a nivel mundial en obesidad entre adultos e infantes, por lo que se espera que en los próximos años se vaya reduciendo este problema e incluso pueda frenarse.
“Las empresas deben participar en este tema. No es la única causa pero deben hacer su aportación y sumarse a este esfuerzo, siendo actores propositivos, buscando la participación en el esquema en conjunto con la academia e investigadores”.
En ese sentido, Raúl Riquelme resaltó que el problema de la obesidad y el sobrepeso tiene como base una buena educación, por lo que se debe capacitar a jóvenes, padres de familia y maestros, e incluso que dentro de las escuelas se incluya una materia de nutrición.
Por otra parte, destacó que el impuesto para desincentivar el consumo de bebidas y alimentos con alto contenido calórico “no ha tenido el resultado ni cumplido los objetivos para los que fue creado, ya que al consumidor no se le educa con impuestos”.
Al contrario, explicó, lo único que está generando es una merma en la capacidad de compra así como en la economía de los ciudadanos con menos recursos, ya que no existe un solo estudio que acredite que estos alimentos son los culpables del sobrepeso y la obesidad.
“Este año, la Secretaría de Hacienda ha recaudado aproximadamente 32 por ciento más de lo que tenía presupuestado con este impuesto, lo que significa que en lugar de disminuir, la venta de este tipo de productos se ha ido incrementado”, refirió.
Al final del día, el objetivo no se está logrando y está teniendo un efecto nocivo para la economía familiar, por lo que es mejor hacer conciencia entre la población respecto a una buena alimentación y a mejorar las decisiones de compra y consumo, apuntó.