El expresidente Felipe Calderón lanzó una dura crítica contra los gobiernos posteriores a su administración por haber permitido, según dijo, el resurgimiento y empoderamiento del crimen organizado en México, con especial énfasis en el caso de Michoacán, entidad golpeada por una ola reciente de violencia.
Los gobiernos que siguieron al de Felipe Calderón fueron los encabezados por Enrique Peña Nieto, Andrés Manuel López Obrador y, el actual de Claudia Sheinbaum.
Desde el foro ABECEB, celebrado en Buenos Aires, Argentina, el exmandatario acusó que la falta de continuidad en su estrategia de seguridad facilitó que los cárteles retomaran el control del Estado. “Cuando yo salí, se dejó que los criminales volvieran a crecer y se apoderaron del Estado”, afirmó.
De acuerdo con El País, en su participación durante el encuentro, el expresidente, quien gobernó de 2006 a 2012 bajo las siglas del Partido Acción Nacional y actualmente reside en España, criticó frontalmente la política de seguridad del partido Morena, al señalar que el debilitamiento del Poder Judicial y la designación de jueces sin experiencia o vinculados al crimen ha socavado el combate contra los grupos delictivos. “Hay gente capaz y la gran mayoría gente sin preparación, algunos corruptos e incluso abogados de narcotraficantes lograron ser jueces”, declaró.



Durante su intervención, Calderón insistió en que la crisis de inseguridad derivada del narcotráfico no solo afecta a México, sino que representa una amenaza regional para América Latina.
Asimismo aseguró que las bandas criminales están reemplazando funciones fundamentales del Estado, como la legislación, la impartición de justicia y la recaudación fiscal. “El problema es que las bandas criminales en América Latina se están apoderando del Estado”, advirtió.
Respecto a Michoacán, el exmandatario hizo hincapié en la expansión de esquemas de extorsión que han sometido a la población, desde comerciantes hasta trabajadores sexuales y migrantes, sin que las autoridades ofrezcan protección.
A modo de ejemplo, relató la historia de un productor agrícola asesinado por oponerse a los criminales, situación que se repitió con su hijo más de una década después. “El gobierno entonces no lo apoyó y lo mataron. Once años después, su hijo hizo lo mismo. Y hace 15 días lo mataron también. Y el sábado, el alcalde”, señaló en referencia a los recientes asesinatos en el sector agrícola.
Finalmente, Calderón defendió la ofensiva militar que emprendió durante su gobierno como una estrategia para recuperar el control territorial de manos de los cárteles y advirtió que la principal amenaza para los pueblos en México es el crimen organizado. Llamó a reconstruir el aparato de seguridad y justicia para enfrentar esta amenaza con instituciones “mucho más eficaces”. (Mas).








