Testigo fiel
Por: Jesús Torres
Ataque a la prensa
La violencia contra la prensa en México no muestra señales de disminuir, al contrario, ha ido en aumento en el primer año de gobierno de Claudia Sheinbaum Pardo.
Con el asesinato del periodista de Durango, Miguel Ángel Beltrán, ocurrido el sábado suman ya 11 los comunicadores ultimados desde octubre del año pasado en que asumió el poder la inquilina de Palacio Nacional.
Apenas a mediados de la semana pasada la periodista Lourdes Mendoza, conductora de La Otra Verdad, denunció amenazas en su contra antes de dar a conocer un reportaje sobre el tráfico de huachicol y el presunto involucramiento de un alto funcionario del gobierno del Estado de México.
No es la primera vez que Lourdes Mendoza es víctima de agresiones e intimidaciones.
La organización defensora de la libertad de expresión ARTICLE 19 ha documentado otros ataques en su contra a través del acoso judicial, discursos de estigmatización a su persona y su familia y campañas de descrédito que buscan contener su trabajo de investigación.
Casos similares se han presentado en Campeche con la gobernadora morenista Layda Sansores, quien mediante el uso de la Fiscalía de Justicia del estado, ha acallado a periodistas y medios de comunicación que se han atrevido a cuestionarla. Incluso los ha obligado a pedirle disculpas púbicamente.
En Tabasco, a principios de octubre el columnista, Jacinto López Cruz recibió amenazas después de una entrevista para una televisora nacional en la que abordó el tema de la inseguridad.
El autor de la columna Ojo Visor tuvo que recurrir al Mecanismo de Protección a Periodistas para salvaguardar su integridad y la de su familia.
En siete años que Morena lleva gobernando el país han sido asesinados 58 periodistas, lo que lo que hace que México siga siendo un entorno letal para la prensa.
La organización Reporteros Sin Frontera (RSF) llamó recientemente a Sheinbaum Pardo a poner fin al uso abusivo de la legislación para censurar y hostigar a periodistas, procesar los casos más graves de asesinatos y desapariciones de periodistas.
Además, pidió garantizar que el presupuesto de 2026 otorgue recursos permanentes y suficientes para proteger a periodistas y defensores de derechos humanos.
Reporteros Sin Frontera urgió la necesidad de una mayor voluntad política y medidas efectivas para proteger a los periodistas en México, que hoy por hoy, es uno de los países más peligrosos para ejercer la comunicación.








