Testigo fiel
Por: Jesús Torres
Sheinbaum, sin mano firme
Lejos de meter orden en casa, la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo ha dejado que miembros de Morena afecten políticamente su investidura y el gobierno de la llamada cuarta transformación.
Sólo en el escándalo que envuelve al senador, Adán Augusto López Hernández, la mandataria no ha podido maniobrar para que el partido que la llevó al poder se quite el estigma de ser un narcopartido y que varias de sus figuras están acusadas de tener vínculos con el crimen organizado.
Los conflictos que invaden a Morena incluso han trascendido a nivel internacional, lo que ha puesto en jaque a la administración de Sheinbaum Pardo.
En su más reciente publicación el influyente diario The New York Times señaló que la presidenta de México enfrenta un escándalo de corrupción en su partido y acusaciones de EU de que los cárteles se han apoderado de su gobierno.
En una análisis escrito por Maria Abi-Habib destaca el caso del exsecretario de Seguridad de Tabasco, Hernán Bermúdez Requena hoy buscado por la Interpol acusado de liderar ‘La Barredora, brazo armado del CJNG y el propable involucramiento del senador, Adán Augusto López.
El problema frente a Sheinbaum, destaca la publicación de NYT, es que el caso Bermúdez Requena y su relación con Adán Augusto, reforzaría una de las principales acusaciones por parte del presidente de EU, Donald Trump para imponer aranceles: “que la élite política de México no está dispuesta a purgarse de la corrupción que durante tanto tiempo ha proporcionado cobertura e impunidad a los cárteles”.
A pesar de todo ello, la semana pasada, durante la sesión de la Comisión Permanente en el Senado, Adán López fue arropado por su bancada ante la exigencia de la oposición (PRI-PAN) para que solicitara licencia y rindiera cuentas ante la justicia.
La rebeldía contra la presidenta, a la que no se le ha visto mano firme ante tantos escándalos, se ha sumado la del morenismo.
Diversos cuadros del partido en el poder echaron por tierra los postulados de la 4T sobre la austeridad republica después de vacacionar en destinos turísticos de Europa y Asia dejando en evidencia a la presidenta que desde su tribuna mañanera afirma y sostiene que no son iguales al conservadurismo.
Lo que ocurre en Morena ha hecho pensar en más de una ocasión que no están tomando en cuenta a la inquilina de Palacio Nacional y lo que es peor, que no tiene el control del partido que la llevó a la presidencia de la república.
