Pese a antiguos señalamientos de conflicto de intereses, la presidenta Claudia Sheinbaum recibió a Lorenzo Simonelli, ejecutivo de Baker Hughes, empresa relacionada con la “Casa Gris” donde vivió José Ramón López Beltrán, lo cual aprovechó Xochitl Galvez para cuestionar a la mandataria.
La presidenta Claudia Sheinbaum recibió en Palacio Nacional a Lorenzo Simonelli, presidente y director ejecutivo de Baker Hughes, empresa estadounidense que ha mantenido contratos millonarios con Petróleos Mexicanos (Pemex).
La visita generó polémica debido al pasado vínculo de la compañía con el escándalo de la llamada “Casa Gris”, relacionado con José Ramón López Beltrán, hijo del expresidente Andrés Manuel López Obrador.
A través de su cuenta oficial de X, la presidenta escribió:
“Recibimos en Palacio Nacional a Lorenzo Simonelli, presidente y director ejecutivo de Baker Hughes, empresa estadounidense con diversos proyectos de inversión en México y Estados Unidos. Hay confianza en nuestro país”.
La reunión fue duramente criticada por la excandidata presidencial Xóchitl Gálvez, quien también recurrió a redes sociales para cuestionar el encuentro y recordar el escándalo que involucró a Baker Hughes y al hijo del exmandatario López Obrador:
“¿Le preguntó por el potencial conflicto de interés del hijo del ex Presidente López Obrador? No se nos olvida que vivió en casa de un alto ejecutivo de Baker Hughes mientras la empresa tenía contratos millonarios con Pemex”, escribió en redes.
LA CASA GRIS
El señalamiento de Gálvez se refiere al reportaje publicado en 2022 por Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI) y Latinus, donde se reveló que José Ramón López Beltrán vivió junto a su esposa en una residencia en Houston, Texas, propiedad de Keith Schilling, entonces alto ejecutivo de Baker Hughes, esto mientras se celebraban contratos con Pemex.
La casa fue habitada a partir del 16 de agosto de 2019, misma fecha en que la filial de Baker Hughes firmó un contrato con Pemex Procurement International (PPI). Durante los siguientes meses, la compañía recibió al menos 27 contratos por 150 millones de pesos, muchos de ellos relacionados con refinerías mexicanas como Salamanca, Tula y Dos Bocas.
Baker Hughes aseguró en 2022 que no existió conflicto de intereses y la empresa negó que la casa estuviera vinculada directamente con sus operaciones.
El caso fue motivo de una investigación abierta por la Fiscalía General de la República (FGR), y en Estados Unidos se reportó que podría haber implicaciones legales por presuntas violaciones a leyes anticorrupción.
Tras el escándalo, lejos de menguar, los vínculos comerciales entre Pemex y Baker Hughes se intensificaron. MCCI reveló en 2023 que la empresa obtuvo contratos por más de 23 mil millones de pesos entre agosto de 2022 y octubre de 2023. Entre ellos, destacan dos contratos por 5 mil millones de pesos para la refinería de Dos Bocas, uno de ellos por “invitación restringida”.
El encuentro entre Sheinbaum y Simonelli ocurre en medio de esta historia no aclarada por completo, y ha reavivado las críticas sobre posibles tratos preferenciales y falta de transparencia.
(emeequis).