La propuesta de reforma constitucional en materia de inimpugnabilidad a reformas o adiciones a la Constitución pone en riesgo al nuevo gobierno, pero también pone en riesgo la imagen de México como un país que respeta las instituciones, aseguró el senador del Grupo Parlamentario del PRI, Alejandro Moreno Cárdenas quien aclaró que el Poder Legislativo y el Poder Judicial son un poder, no empleados del poder.
Al fijar posicionamiento en contra de dicho dictamen, Moreno Cárdenas sostuvo que si se elimina la posibilidad de impugnar reformas constitucionales, se va a crear un entorno en el que los derechos y las garantías constitucionales pueden ser modificados sin control alguno, lo que generará incertidumbre y debilitará la confianza en el Estado.
Señaló que las modificaciones constitucionales propuestas no solo destruirán el sistema judicial, sino también las instituciones del país porque se corre el riesgo de que cualquiera pueda decir que México ya no es una República, que ya no es un Estado federado, que ya no hay partidos políticos o que ya no se respeta la propiedad privada.
Por ello, añadió, prohibir medios de control limitaría la capacidad de los ciudadanos y de los poderes públicos para poder cuestionar actos que podrían atentar contra la propia Constitución. En síntesis, puntualizó, la esencia del control constitucional es que el poder tenga límites y que no pueda modificar la constitución a su antojo.
“El control constitucional, viola el principio de no retroactividad y protección de los derechos humanos, viola la supremacía constitucional que es el respeto a la Constitución, elimina la posibilidad de presentar nosotros esas inconformidades contra reformas que se hagan que sean no legales, que incurran inconsistencias y que sean fraudulentas y también genera un gran clima de inseguridad y de falta de confianza al estado de derecho, debilita la institución en nuestro país”, enfatizó.
Dijo que al prohibir las impugnaciones se niega esa posibilidad de revisarlas y el poder no tiene límites, no lo dice ni en el 135 con claridad y no lo dice en la Constitución, que no pueda tener un mecanismo de control y que puedan reformar la Constitución a su antojo. Además, elimina la posibilidad de revisar las reformas adoptadas en un proceso irregular, defectuoso o fraudulento. compañeras y compañeros.
“Sepan para qué les dio el mandato el pueblo, y el pueblo no les dio el mandato para destruir este país y para destruir a la República. No hay que pensar en las próximas elecciones, compañeras, compañeros, hay que pensar en las próximas generaciones de país. Ustedes no pueden legislar a su antojo la Constitución, porque como bien se ha dicho que tienen la mayoría mecánica de la mayoría calificada, y eso es un riesgo para cualquier sistema democrático”, concluyó.