Testigo fiel
AMLO y su bola de cristal
Por: Jesús Torres
Pareciera que el dirigente de Morena, Andrés Manuel López Obrador anda desesperado destapando candidatos de otros partidos políticos ante la proximidad de las elecciones para la presidencia de la república a fin de seguir generando ruido y atrayendo reflectores con el único propósito de mantenerse en el ánimo del electorado y no caer en las encuestas de aquí al 2018.
De hecho, el tabasqueño sabe que ya no puede crecer más electoralmente, que ya tocó tope y lo que viene en el peor de los escenarios es empezar a caer estrepitosamente sino busca como permear en el consiente de la gente, por eso recurre a todo lo que pueda y ‘dispara’ a todo lo que se mueva.
Sabe que los partidos PRD y PAN y los que se sumen en su contra con el recién formado Frente Amplio Democrático no permitirán que llegue a la presidencia de la república.
Y es que López Obrador, como si poseyera una bola de cristal, en uno más de sus disparates declaró recientemente que el candidato presidencial del PRI para las elecciones del próximo año será el titular de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), José Antonio Meade Kuribreña, un político, economista y abogado, sin afiliación partidista, y que ha ocupado diversos cargos en la administración pública federal desde el gobierno del ex presidente, Felipe Calderón Hinojosa.
Una especie de tecnócrata dedicado a las finanzas públicas.
Pero la cosa no va por ahí, lo que no sabe el dirigente de Morena es que el próximo abanderado del PRI a la presidencia de la república será un candidato o candidata cien por ciento priista, surgido de las bases del tricolor, de amplia trayectoria, con arrastre entre dos sectores importantes: los jóvenes y las mujeres y con mucho temple para conducir los destinos de este país.
Pese a todo, desde su óptica, para el originario de Macuspana ya existe un arreglo o ‘promiscuidad política’ entre el PRI, PAN y PRD para tener dos candidatos que le den continuidad al modelo neoliberal.
Esto es, que si es Meade, tendrá el apoyo del PAN y quien salga del Frente Amplio Democrático formado por el PRD y el PAN contará con el respaldo del PRI. Así el nivel de su fantasía.
Por lo pronto, ayer mismo el secretario de Hacienda dio el revire a López Obrador al desmarcarse de cualquier tipo de aspiración política toda vez que se encuentra cien por ciento dedicado a su trabajo para cumplir con sus obligaciones.