El exgobernador de Quintana Roo Roberto Borge fue expulsado este jueves del Partido Revolucionario Institucional (PRI). El exmandatario fue detenido el fin de semana pasado en Panamá y está acusado de lavado de dinero y daños al erario.
«Por unanimidad, la Comisión de Justicia Partidaria del @PRI_Nacional ha expulsado a @robertoborge como militante de este partido», informó el tricolor en su cuenta de Twitter.
El exmandatario, que tenía ya suspendidos sus derechos como militante del PRI desde diciembre pasado, se convierte en el tercer exgobernador expulsado del PRI durante los últimos meses.
Los otros dos fueron Javier Duarte, de Veracruz, quien es acusado de actos de corrupción y se encuentra detenido en Guatemala, y Tomás Yarrington, de Tamaulipas, acusado de delitos contra la salud (narcotráfico) y quien se encuentra tras las rejas en Italia.
En conferencia de prensa, el presidente de la Comisión de Justicia Partidaria, Fernando Elias Calles, detalló que se declaró fundado el procedimiento sancionador contra Borge por acreditarse las conductas que se le imputan respecto a su falta de probidad como gobernador, y que provocaron desprestigio y daños a la imagen del PRI.
Advirtió que ello entraña una evidente desviación a los principios y a sus normas estatutarias, por lo que se le expulsa del partido y sin posibilidad de poder reafiliarse.
Suspenden a diputado.
También fueron suspendidos de sus derechos partidarios al diputado local Saúl Beltrán Orozco, a quien se le asocia a una organización criminal denominada «Los Tequileros», a la que se le atribuyen violaciones, secuestros, extorsiones, asesinatos, entre otras actividades ilícitas en la zona de Tierra Caliente de Guerrero.
En tanto, el líder del Sector Popular priista, Arturo Zamora, en su calidad de integrante de dicha instancia, advirtió que el comportamiento de Borge Angulo violó los lineamientos del código de ética del partido y puso en tela de juicio la buena imagen de la mayoría de la militancia.
Refrendó que el PRI no protege ni protegerá a quien en el ejercicio público defraude la confianza ciudadana y advirtió que no guardarán silencio ante la corrupción porque el partido no será cómplice de nadie.
Afirmó que en el partido tricolor están decididos a la transparencia y rendición de cuentas, por lo que decidieron retirar la militancia al exgobernador de Quintana Roo quien, dijo, es «un personaje non grato. No es bienvenido en la familia priista». (Expansión).
