Este miércoles 3 de enero, miles de personas se habían reunido en el cementerio de la ciudad de Kerman, situada a unos 820 kilómetros al sureste de Teherán. Las personas rendían homenaje al ex jefe de la Fuerza Quds de Irán, asesinado hace cuatro años en un ataque con drones estadounidenses en Irak.
Sin embargo, durante la celebración, se registraron dos explosiones, el cual causó la muerte de más de 100 personas y cientos de personas heridas.
La televisión estatal iraní informó que, “las explosiones fueron causadas por ataques terroristas”. Asimismo, la televisión estatal confirmó que al menos 100 personas habían fallecido y que el número de heridos se había incrementado a más de 200 personas.
La agencia oficial de noticias IRNA, informó que el número de muertos aumentó a 103 tras el fallecimiento de personas heridas durante “las explosiones terroristas”, en el cementerio de Kerman.
Las explosiones ocurrieron durante la conmemoración de la muerte del general Soleimani, considerado en Irán un mártir de la revolución. El general murió en 2020 en un ataque estadounidense con drones en el aeropuerto de Bagdad.
Tras las explosiones, las autoridades de Kerman aseguraron que las explosiones son un acto terrorista. Además, activaron medidas de emergencia en los hospitales para recibir a los heridos.
La agencia oficial de noticias IRNA, dijo que una de las bombas explotó a unos 700 metros de la tumba de Soleimani. Mientras que la segunda explosión se produjo a un kilómetro de distancia.
El general Qassem Soleimani fue comandante de la Fuerza Quds, de la Guardia Revolucionaria, un grupo de élite de Irán.
Era el arquitecto de las actividades militares regionales de ese país. Soleimani es considerado un ícono nacional entre los partidarios de la teocracia de Irán.
Además ayudó a asegurar el gobierno del presidente sirio Bashar Assad, luego de que las protestas de la Primavera Árabe en 2011 en su contra se volvió una guerra civil. Dicha guerra se convirtió en una regional, y que sigue hasta la fecha.
Soleimani murió en un ataque estadounidense con drones en Irak en enero de 2020. Fue el entonces presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quién ordenó el asesinato del general iraní en ese año, y describió a Soleimani como “el terrorista número uno en cualquier parte del mundo”.