Con la finalidad de tener más alimentos saludables y libres de pesticidas, así como apoyar la economía familiar y hacer conciencia ciudadana, esta semana el Ayuntamiento de Centro puso en marcha el Primer Huerto Orgánico e inició con el ciclo de talleres “Jardines Comestibles” y “Economía Verde”, contemplados para impartirse en el marco del programa “Mejora tus Hábitos” que impulsa el Voluntariado del DIF Centro.
En el marco de estos esfuerzos, la presidenta del Voluntariado DIF Centro, Ximena Martel Cantú, constató en una visita al Centro Acuícola del Municipio, donde estuvo acompañada de Alejandro García Baduy, director de Desarrollo de Centro, que fue todo un éxito la instalación y cuidado del Primer Huerto Orgánico que realiza la administración de Gerardo Gaudiano, donde ya se cosechan rábanos, calabazas, chile habanero, pepino, entre otras hortalizas.
De esta manera, se da paso a la etapa de talleres, con la que se busca llegar a distintas escuelas y comunidades del municipio, promoviendo la economía de las familias, el cuidado de la naturaleza y la mejora de los hábitos alimenticios.
Así, en la escuela primaria Macedonio Rivero Rivero de la ranchería La Lima, Parrilla, se realizó el primer taller de “Economía Verde” impartido por Vianey Pérez, en donde el personal de ese plantel educativo recibió una introducción al tema del medio ambiente, al cuidado de desechos, a la utilización máxima de todo recurso en casa, oficina o escuela.
Durante la inauguración del taller, Martel Cantú felicitó a los participantes “porque hay muchos discursos al respecto del medio ambiente pero hoy el Ayuntamiento está aquí con un taller de acciones concretas, fáciles de hacer, sin costo, para beneficio de sus alumnos pero sobre todo de sus familias, porque todo esto puede implementarse no solo en el salón de clases sino en sus hogares”.
La presidenta del Voluntariado DIF Centro explicó que en breve se llevará a cabo el segundo taller de “Jardines Comestibles”, en donde se enseñará a niños a iniciarse en el cultivo de hortalizas, usando cualquier espacio libre de su vivienda, generando una parte de sus alimentos, cosechados sin productos químicos.
Recordó que un huerto atendido adecuadamente puede brindar hortalizas para complementar la alimentación familiar o incluso generar excedentes que se puedan comercializar.
Con este taller, los beneficios que los participantes pueden adquirir son varios, siendo algunos de ellos: obtener hortalizas a más bajo precio y mejor calidad, ampliar la convivencia familiar e integración social, promover la seguridad alimentaria, fomentar una cultura de protección ambiental, reducir el sedentarismo en el hogar y realizar una actividad que propicia relajación y tranquilidad.
El proyecto de “Economía Verde y Jardines Comestibles” tiene fines educativos, culturales, de salud, economía familiar, recuperación de espacios públicos abandonados, de inspiración para personas solas, jubiladas o maltratadas, así como de recreación.
