El Valencia FC, que acaba de cambiar de entrenador y está sumido en una profunda crisis en Liga rondando los puestos de descenso, no consiguió enderezar el rumbo el martes y cayó por 4-1 en casa frente al Celta de Vigo en el partido de ida de los octavos de final de la Copa del Rey, un resultado que lo deja contra las cuerdas en la competición.
En apenas 20 minutos, Iago Aspas de penalti, Bongonda y Wass pusieron el 3-0 en el marcador a favor del Celta, prácticamente sentenciando la eliminatoria.
Parejo recortó distancias en el minuto 58 de la segunda parte, pero el equipo gallego volvió a ampliar distancias a través de Guidetti en el minuto 75, profundizando la crisis valencianista, que en Liga sólo evita los puestos de descenso por la diferencia de goles.
El exseleccionador italiano Cesare Prandelli, el noveno entrenador del Valencia desde 2012, dimitió a finales de diciembre tras 91 días en el cargo después cosechar una victoria en ocho partidos de Liga.
Se dice que Prandelli había perdido la fe en el Valencia después de que se le comunicara que no podría fichar a los cinco jugadores que le había prometido el multimillonario propietario del club, Peter Lim, en una reunión en Singapur a principios de este mes, pero el presidente del Valencia, Anil Murthy, dio una versión diferente de los hechos en una rueda de prensa el fin de semana, criticando al italiano por abandonar el club en un momento delicado.