Los diputados federales del PRI insistimos en tener un Presupuesto con otras características, que tenga una mejor calidad del gasto público; que evite la ejecución del mismo, con sobre ejercicios o con subejercicios que obedecen más a calendarios y clientelas electorales, que a promover inversión y empleos, afirmó la diputada federal Blanca Alcalá.
Al posicionar en contra del Proyecto de Presupuesto de Egresos Federal para 2023, la vicecoordinadora de la bancada tricolor manifestó que a su bancada le habría gustado encontrar un Presupuesto que permitiera un mejor crecimiento, que pudiera darles a las familias de menores ingresos mejores salarios, para resarcir lo que representa el mayor gasto de bolsillo.
“Un Presupuesto que gastará más, pero que gastará mejor. Eso, sin duda es lo que necesita el pueblo de México. Eso es justo lo que hoy la mayoría oficialista se niega a asignar”, subrayó la legisladora priista.
La también secretaria de la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública recordó que entre 1998 y 2018, como efecto de congresos divididos, de pesos y contrapesos, de un país que reconocía su pluralidad, siempre se dieron cambios; mientras, hoy, la consigna es ni una coma y reclamó que los cambios del 0.07 por ciento, se consideran un gran logro.
Desafortunadamente, expuso, el gasto que nos presentan siempre se calcula por arriba de la recaudación que pueden fondear, para quedar bien cada septiembre y noviembre en la discusión presupuestal. Pero, desafortunadamente, agregó, cuando cerramos el año nos encontramos con un déficit acumulado, en el caso del 2021; de más del 11 por ciento, en el cierre del 2020, y este año no será la excepción.
Por ello, reiteró que su grupo parlamentario, como oposición, no renuncia a su derecho de disentir, de señalar y de votar en contra de un Presupuesto que no está a la altura de las y los mexicanos, y mucho menos de los estados.