La Comisión Nacional de Justicia Partidaria del CEN del PRI suspendió sus derechos partidistas al ex gobernador de Quintana Roo, Roberto Borge Angulo.
Como resultado de su XII sesión ordinaria, el organismo priista fundamentó la medida en la gravedad de las acusaciones en contra del ex mandatario quintanarroense.
“En el Procedimiento Sancionador iniciado por el militante Octavio Delgado Casillas en contra del ex gobernador de Quintana Roo, Roberto Borge Angulo, se determinó emitir la medida consistente en la imposibilidad para ejercer sus derechos de militante, hasta en tanto se resuelva el procedimiento iniciado en su contra, dada la gravedad de las acusaciones, con efectos jurídicos de cara a cualquiera de los escenarios que contempla el artículo 58 de los Estatutos del Partido Revolucionario Institucional”, indica el resolutivo de la Comisión Nacional de Justicia Partidaria.
En la misma sesión, la Comisión resolvió expulsar del partido a Arturo Bermúdez Zurita, José Antonio Chara Mansur Beltrán y Gabriel Deantes Ramos.
En los tres casos, la Comisión Nacional de Justicia Partidaria acreditó su falta de probidad como militantes del PRI durante el gobierno de Javier Duarte de Ochoa, en Veracruz.
“En los Procedimientos Sancionadores iniciados el 20 de septiembre último en contra de los militantes Arturo Bermúdez Zurita, José Antonio Chara Mansur Beltrán y Gabriel Deantes Ramos, por realizar conductas contrarias a los documentos básicos del Partido Revolucionario Institucional, y por falta de probidad durante el gobierno de Javier Duarte en el estado de Veracruz, se determinó su expulsión, al acreditarse que los señalamientos de corrupción en su contra y su actuar han generado un deterioro grave en la imagen de nuestro instituto político”, se señala.
En la sesión también se aprobó la expulsión del ex gobernador de Tamaulipas, Tomás Yarrington, por vulnerar sistemáticamente los estatutos del partido, el código de ética y cometer actos de falta de probidad durante su gestión, al ser señalado como autor de diversos actos de corrupción y, en consecuencia, haber afectado la imagen del PRI.
Con estas acciones, el PRI refrenda su compromiso de combatir frontalmente la corrupción y sancionar todas las conductas que afecten el desempeño de los funcionarios públicos emanados de sus filas.
En el Partido Revolucionario Institucional se seguirán analizando con toda puntualidad los otros casos señalados por las instituciones del Estado mexicano y en los medios de comunicación.