Testigo fiel
Por: Jesús Torres
Mexicanos en medio de la barbarie
Esta semana que termina fuimos testigos de actos violentos que rayan en la barbarie, como los asesinatos de dos sacerdotes jesuitas a manos del crimen organizado en el estado de Chihuahua.
Resulta por demás lamentable que atrocidades de este tipo, por no llamarlas de otra manera, sean lo que prevalezca en nuestro país.
¿Cómo se le podría calificar a personas o grupos que actúan fuera de la ley, con salvajismo, crueldad o faltos de compasión hacia la vida o la dignidad de los demás?
En redes sociales han sido múltiples los videos que circulan sobre ejecuciones, degollamientos y desmembramiento de cuerpos como si fueran actos heroicos o trofeos de quienes los perpetran, peor que talibanes.
Pero en Palacio Nacional el que juró cumplir y hacer cumplir la ley y pacificar este país en su tercer año de gobierno, insiste en que continuará con la estrategia de ‘abrazos no balazos’ contra la delincuencia.
Pareciera que la vorágine que ha desatado la violencia, condenada incluso a nivel mundial, y más recientemente por el Vaticano, peor que si estuviéramos en una guerra por tantos asesinatos, poco importara al gobierno de la llamada Cuarta Transformación.
A inicios de semana nos amanecimos con la noticia de que el gobierno de López Obrador había rebasado los homicidios dolosos registrados en todo el sexenio del expresidente, Felipe Calderón.
De acuerdo con cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública se tenía un registro ya de 121 mil 642 asesinatos en tres años y medio de AMLO, superando así los 120 mil 463 acumulados en el gobierno de Calderón.
Pero el originario de Macuspana, insiste un día sí y el otro también que su estrategia en materia de seguridad no ha fallado. No entiende que no entiende.
Apenas en marzo pasado el Parlamento Europeo pidió a López Obrador actuar de manera firme y contundente contra uno de los grandes lastres del país, en clara alusión a la violencia, que coloca a México como uno de los lugares más peligrosos del mundo para ejercer el periodismo y la defensa de los derechos humanos.
Pero eso no es todo, derivado de los índices delictivos, el Departamento de Estado de EU recientemente emitió una alerta de viaje para 30 estados de la república mexicana. Sólo están libres de peligro, Campeche y Yucatán.
Como se ha señalado y se ha dicho bien, la violencia no entiende de ideologías, por lo que no hacer nada o negar la realidad solo hará que esto se ponga peor.
¿Este es el país que quiere dejar al término de su gobierno el tabasqueño y sentar en la silla a otro tabasqueño? Ahí queda para la reflexión.
