Testigo fiel
Por: Jesús Torres
Adán: ¿Tercero en discordia?
En la adelantada carrera por la presidencia de la república, Andrés Manuel López Obrador, ahora sí, ya mencionó al secretario de gobernación, Adán Augusto López Hernández como uno de sus probables sucesores, además de Claudia Sheinbaum y Marcelo Ebrard.
No es que el paisano de AMLO se encuentre bien posicionado en las preferencias al interior de Morena, para nada, se trata de una tercera carta, ficha o corcholata, que esté ahí en casos extremos por un desencuentro o polarización entre la jefa de gobierno de la Ciudad de México y el titular de Relaciones Exteriores.
La tercera opción en el juego sucesorio tendría que ver igualmente con el daño colateral que está provocando sobre Sheinbaum y Ebrard el colapso de la Línea 12 del Metro que dejó 26 muertos en marzo del año pasado.
Como aquí se decía en este espacio de opinión, se trata de una pesada losa con la que cargan ambos aspirantes a la silla presidencial, incluido el dirigente nacional de Morena, Mario Delgado, y que electoralmente podría cobrarles la factura.
Aunque López Obrador haya dicho ayer en su conferencia mañanera que a Claudia Sheinbaum la quiere mucho y que Marcelo Ebrard está haciendo un trabajo de primera, al final del camino los escenarios podrían cambiar en sentido negativo para ambos personajes una vez que lleguen los momentos definitorios.
Quienes conocen al originario de Macuspana saben que no será mediante una encuesta, o el pueblo quien elija al próximo abanderado presidencial de Morena, nada de eso, el ungido se decidirá en Palacio Nacional.
En el caso del secretario de Gobernación, podría jugar el papel como el tercero en discordia, pero en la realidad el mismísimo López Obrador sabe que su paisano no levanta en las encuestas.
En la mayoría de los sondeos aparece muy lejos de las preferencias, lo que representaría una inminente derrota electoral para Morena en las elecciones de 2024 con quien ponga enfrente la oposición.
Apenas a inicios de esta semana El Financiero, diario de circulación nacional publicó una encuesta que coloca en empate técnico a Sheinbaum y Ebrard en las preferencias electorales rumbo al 2024.
Entre la población en general, así como a seguidores del partido a los que se consultó el secretario de Gobernación apenas alcanzó un 4 y 5 por ciento respectivamente, contra un abismal 29% del canciller y un 30% de la jefa de gobierno.
Difícil de remontar para Adán López, aún y a pesar del paisanaje y todas las de perder, que ya lo tienen adentro en la disputa por la candidatura presidencial.
