Perpetrada la amenaza a Ucrania y mientras las tropas rusas cercan la capital ucraniana y Occidente estudia sanciones para aislar a Rusia, Vladimir Putin apunta ahora a otros países: Finlandia y Suecia.
La portavoz de Exteriores rusa, Maria Zajarova, dijo en rueda de prensa que «todos los Estados participantes de la OSCE [Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa] a título nacional, incluidos Finlandia y Suecia, reafirmaron en su día el principio de que la seguridad de algunos Estados no debe construirse a expensas de la seguridad de otros países. Es evidente que la adhesión de Finlandia y Suecia a la OTAN , que es principalmente un bloque militar, tendría graves consecuencias militares y políticas que requerirían que nuestro país tome medidas recíprocas».
Por su parte, Finlandia ha vetado el canal ruso RT para apoyar a Ucrania.
En una nueva comparecencia televisada, el presidente ruso describió al Gobierno de Zelenski como una «banda de drogadictos y neonazis que se ha instalado en Kiev y ha tomado como rehén a todo el pueblo ucraniano». Es más, Vladimir Putin pidió a las fuerzas armadas ucranianas que tomen el poder en su país un día después de que Moscú lanzara una invasión contra Ucrania.
«Una vez más hago un llamamiento al personal militar de las fuerzas armadas de Ucrania: no permitan que los neonazis y los nacionalistas radicales ucranianos usen a sus hijos, esposas y ancianos como escudos humanos«, dijo Putin en una reunión televisada del Consejo de Seguridad de Rusia. Además, aseguró que con ellos «será más fácil llegar a un acuerdo» con el objetivo de poner fin a la operación militar que inició en Ucrania el jueves.
Putin está dispuesto a enviar una delegación a Minsk, capital de Bielorrusia, un país aliado de Rusia, para llevar a cabo negociaciones con Ucrania, indicó su portavoz.
Ucrania quiere la paz y está dispuesta a mantener conversaciones con Rusia, incluida la adopción de un estatus neutral con respecto a la OTAN, dijo un asesor de la oficina presidencial de Ucrania, Mijailo Podoliak.
Zelenski ha propuesto a Putin sentarse a la mesa de negociaciones para evitar la muerte de personas. «La invasión rusa de Ucrania no es sólo una invasión, es el comienzo de una guerra contra Europa», afirmó el líder ucraniano.
El ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Serguei Lavrov, declaró que Moscú estaría dispuesto a mantener conversaciones con Kiev, pero solo una vez que el ejército de Ucrania haya depuesto las armas. También dijo que Rusia no quiere que los «neonazis» gobiernen Ucrania.
Rusia está invadiendo Ucrania porque quiere que el pueblo ucraniano sea independiente y tenga la posibilidad de definir libremente su destino, afirmó Lavrov. El ministro insistió en que el presidente ucraniano estaba mintiendo cuando dijo que estaba dispuesto a discutir el estatus neutral de Ucrania.(El Mundo).