Testigo fiel
Por: Jesús Torres
Del show a la cruda realidad
Lo que se vio el miércoles de esta semana en el aeropuerto de Santa Lucía, no fue sino otro show mediático a los que ya está acostumbrado montar el inquilino de Palacio Nacional, Andrés Manuel López Obrador.
El tabasqueño, por cierto, lució sin el uso del cubrebocas a pesar de haber contraído el Covid-19, según se pudo observar durante la presentación de una maqueta de lo que será la nueva terminal área.
Presumir una obra que no está concluida y lo que es peor, de calificarla como un fenómeno de la ingeniería, no es otra cosa que un distractor de los que echa mano López Obrador para evadir los temas urgentes en los que su gobierno, como ha quedado evidenciado, no ha sido eficaz ni eficiente.
Lo que los mexicanos están esperando es que haya resultados en diez meses que el país lleva de pandemia por el coronavirus, al grado que se han alcanzado escenarios catastróficos después de superar las 160 mil muertes previstas para marzo por la Universidad de Washington.
Pero además, cuando en otros países han avanzado en la vacunación de sus ciudadanos, en México primero tuvieron que abrir un registro en el internet para personas de la tercera edad.
Hasta ayer, Chile había vacunado a casi 1.4 millones de personas en solo una semana tras la llegada de cerca de 4 millones de dosis del laboratorio chino Sinovac.
En Estados Unidos, bajo el gobierno de Joe Biden, para el mes de abril todas las personas podrían recibir la vacuna contra la COVID-19 gracias a la aceleración en la producción y la mejora en la distribución.
En México, que tiene una población de 126 millones de habitantes, apenas y se han aplicado 717 mil 820 dosis contra el SARS-CoV-2.
Ya ni que decir de las condiciones económicas por las que atraviesa el país a raíz del cierre de un millón 10 mil 857 empresas y la pérdida de 4.12 millones de puestos de trabajo hasta finales del año pasado.
Y si eso no fuera suficiente, la ola de violencia en México no se detiene, el año pasado se registraron 35 mil homicidios dolosos y en lo que va de este 2021 sólo el primer día del mes de enero se contabilizaron 73 asesinatos, como nunca había ocurrido.
Estos son los temas en los que debe estar centrado el gobierno de la llamada cuarta transformación y no andar anticipando inauguración de obras que aún no están terminadas. Una cosa es el show y otra la cruda realidad.
