El segundo informe del gobierno federal de Morena estuvo lleno de engaños y falsedades, expresó el Presidente del CDE del PRI, Dagoberto Lara Sedas, al calificar los resultados en economía, salud, seguridad y desarrollo social, entre otros, como un desastre y fracaso que tiene al país al borde del colapso.
“Hoy pretende manipular con más promesas a la gente”, puntualizó el líder priísta durante una entrevista en la que alertó que el presidente Andrés Manuel López Obrador sigue haciendo campaña para su partido tal como quedó demostrado con sus spots en los que hace gala de sus discursos, por cierto, incumplidos hasta la fecha.
“Fue una vez más un recurrente ejercicio de contrastes: repeticiones de lo que ha sido su proyecto político y lo mal que el país estuvo en los anteriores gobierno”, señaló.
Habló, precisó, de una honestidad valiente y de combate a la corrupción, cuando su gabinete está lleno de corruptos confesos y desde Palacio Nacional protege, por ejemplo, a su hermano Pío Lorenzo López Obrador, que recibió bolsas de dinero para operar la campaña de Morena, señalando que fueron “aportaciones”. No son inventos, son evidentes actos de corrupción que el gobierno morenista no ve.
MÉXICO VULNERABLE
En materia de salud, los números no les cuadran; sus estrategias para contener la pandemia del Covid-19 fueron fallidas, al grado que han muerto más de 64 mil mexicanos, cuyas familias están de luto esperando una disculpa pública y honesta y no homenajes en los que solo se dilapida el dinero del pueblo y se promociona la imagen de funcionarios.
Mientras que en materia económica, prometieron un crecimiento del 4 por ciento, el Inegi reporta que en el segundo trimestre de 2020, el Producto Interno Bruto (PIB) de México cayó 18.7 por ciento con respecto al mismo periodo de 2019.
La crisis económica por la epidemia dejó una pérdida histórica en la generación de empleo, en cinco meses de contingencia, de un millón 117 mil 584 empleos formales, según cifras oficiales, sin embargo los organismos empresariales e independientes calculan en más de 3 millones de desempleados.
El despilfarro del gobierno morenista en megaproyectos como el aeropuerto de Santa Lucía, el Tren Maya, refinería Dos Bocas, y supuestos programas sociales, convertidos en barriles sin fondo, han generado más opacidad en un gobierno que destruye y vulnera a las instituciones independientes.
México, dijo, es hoy un país vulnerable, que atraviesa una fuerte crisis económica, sanitaria y social, sin precedentes, mientras que el gobierno sigue desconectado de la realidad. La recesión es más que inminente y en Palacio Nacional siguen en campaña.
A TABASCO LE QUEDA A DEBER
Como presidente de origen tabasqueño, dijo el líder priísta, se esperaba que diera mucho por su estado, según lo prometió, sin embargo, le ha quedado a deber en economía, salud, seguridad y desarrollo social, entre otros rubros.
A Tabasco no sólo no le aumentó el presupuesto anual, sino que le recortó millonarios recursos que se tenían programado para obras de desarrollo, pero el gobierno local como lacayo al servicio de lo que se ordena en Palacio Nacional, prefirió callar ante tal avasallamiento.
